Salud España , León, Miércoles, 01 de junio de 2011 a las 17:39

Cerca de 900 mujeres mueren al año en España a causa del cáncer de cérvix

La Clínica San Francisco acoge una sesión científica sobre la prevención primaria de esta enfermedad

AMR/DICYT La Clínica San Francisco de León ha acogido una sesión científica sobre la prevención primaria del cáncer de cérvix. Esta actividad formativa ha sido impulsada por el centro ginecológico de la Clínica San Francisco y ha contado con la presencia del doctor Miguel Angel González Roca, asesor clínico de vacunas. Entre los asistentes, además de los especialistas en Ginecología también estuvieron presentes profesionales médicos de otras especialidades y personal de Enfermería.


Durante su intervención, Miguel Angel González Roca explicó la finalidad de la vacuna para prevenir el cáncer de cérvix “la condición necesaria aunque no suficiente para se que se produzca un carcinoma de cérvix es la infección persistente por el virus del papiloma humano, las vacunas lo que hacen es bloquear la entrada de este virus en el interior de la célula, con lo cual no se produce la infección, y al no producirse dicha infección no se acabará desarrollando dicho cáncer”.


Esta sesión clínica se enmarca dentro de la política de formación continuada por la que apuesta el centro ginecológico de la Clínica San Francisco y gracias a la cual ofrece a sus pacientes una atención médica de calidad y actualizada.


Cáncer de cérvix

 

El carcinoma de cérvix es el segundo cáncer más frecuente en la población femenina y su incidencia se da principalmente en mujeres entre los 45 y los 65 años. La supervivencia a este cáncer a los 5 años es muy elevada y llega al 90%, mientras que en estadios avanzados la esperanza de vida es sólo del 14%. En nuestro país se estima que al año se diagnostican 2.000 nuevos casos de este cáncer y que 900 mujeres mueren anualmente por esta enfermedad.
 

Aunque existen diversos factores de riesgo, la principal causa del cáncer cervical es la infección por el virus del papiloma humano, que aunque es muy frecuente y se transmite por contacto sexual, en la mayoría de los casos desaparece por sí sola y no provoca ninguna secuela. Gracias al descubrimiento hecho por los investigadores de la relación directa entre cáncer cervical y el virus del papiloma humano, se pueden trabajar en opciones de prevención primaria como es el caso de la vacunación.

 

En las fases iniciales el cáncer de cérvix no suele presentar ningún síntoma, pero con el paso del tiempo puede provocar sangrados vaginales anormales, entre los periodos menstruales regulares, después de relaciones sexuales o tras la menopausia, mayor secreción vaginal, dolor pélvico o durante las relaciones sexuales y periodos menstruales más prolongados y abundantes que antes.