Científicos de la Universidad de Valladolid estudian la obtención de proteína a partir de vinaza
Cristina G. Pedraz/DICYT El Grupo de Tecnología de Procesos Químicos y Bioquímicos de la Universidad de Valladolid, en el marco del proyecto Cenit Acuisost (Acuicultura Sostenible), investiga la obtención de proteína a partir de vinaza, el residuo líquido final “procedente de la fermentación de melaza de remolacha y etanol”, tal y como ha recordado a DiCYT María Teresa García Cubero, una de las científicas del grupo.
La valorización de coproductos y residuos tanto del sector azucarero como de otro tipo de industria agroalimentaria es una de las líneas de trabajo del grupo de investigación, que colabora en esta actividad del proyecto Acuisost con Azucarera Ebro. En este sentido, trabajan con compuestos difícilmente degradables y valorizables, como es la vinaza, de la que tratan de aprovechar “su importante contenido en nitrógeno”.
El nitrógeno es uno de los elementos que más influyen en el metabolismo y en el desarrollo de la remolacha y va pasando por las distintas etapas de fabricación en la industria azucarera, sin que al final del proceso se sepa muy bien qué hacer con él. “Tratamos de obtener proteína a partir de esa fuente de nitrógeno y para ello estamos utilizando algas, que usan esta materia nitrogenada y parte de la materia orgánica que tiene la vinaza para crecer”, explica Cubero.
De este modo, “lo que era un desecho se puede convertir en un producto con valor añadido importante”, asegura la experta, quien precisa que el grupo cuenta con un reactor “en el se modifican las condiciones de operación para optimizar el proceso y obtener la máxima cantidad de alga posible utilizando la vinaza”.
La investigación se enmarca en una de las siete actividades que incluye el proyecto Acuisost, en concreto en la de Materias Primas, que pretende alcanzar el conocimiento científico y técnico necesario para la incorporación de nuevas materias primas en la elaboración de dietas acuícolas. En este sentido, se buscan fuentes susceptibles de ser empleadas en alimentación acuícola, la aplicación de tratamientos para acondicionarlas adecuadamente y estudiar el comportamiento en los procesos de mezclado para la obtención de las diferentes dietas.
Actividades del proyecto
Con un presupuesto cercano a los 21 millones de euros y la participación de 25 empresas y 20 centros tecnológicos, el proyecto está liderado por Dibaq Diproteg, con sede en la localidad segoviana de Fuentepelayo.
Además de la actividad centrada en las materias primas hay otras basadas en los sistemas biotecnológicos (preparados y sistemas que mejoren las condiciones y procesos digestivos, refuercen los sistemas inmunes y protejan a diferentes especies de procesos patológicos); en los aditivos y encapsulación (obtención de resultados sobre los métodos de extracción y de procesamiento de diferentes pigmentos necesarios en la alimentación de peces); o los cultivos de especies (en la cual se realizarán cultivos de diversas especies como la lubina de baja salinidad).
A nivel general, el trabajo nacional tiene como objetivo el desarrollo y la evaluación de materias primas, tecnologías y sistemas aplicados en el sector acuícola. Iniciado en 2007, anualmente se realizan reuniones donde se muestran los avances llevados a cabo. El último encuentro, celebrado el pasado 28 de julio en las instalaciones del edificio Pignatelli de Zaragoza, sirvió para realizar diversas reuniones paralelas de los diferentes comités que gestionan el buen desarrollo y funcionamiento del proyecto.
José Luis Tejedor, coordinador general del Proyecto Acuisost, del departamento técnico de Dibaq, dio a conocer los últimos avances y desarrollos llevados a cabo durante la anualidad 2009, así como el estado de la investigación en distintas actividades y colaboraciones.