Ciencias Sociales Colombia , Bogotá D.C., Lunes, 16 de noviembre de 2020 a las 13:15

Descubren una pluma f贸sil que desvela el origen de la placa del Caribe

La placa tect贸nica del Caribe, que se encuentra debajo del mar y b谩sicamente est谩 conformada por tierra s贸lida, no se origin贸 donde hoy est谩, sino que se form贸 en el Pac铆fico oeste, hace 100 millones de a帽os

UNAL/DICYT Este dato fue posible gracias al hallazgo de una pluma fósil, fenómeno que consiste en dos conductos de alta densidad que indican la formación de la placa tectónica del Caribe y que ayudarían a explorar riesgos geológicos –geopeligros– en la zona.

 

Las placas tectónicas, que se ubican debajo de la corteza terrestre (litósfera), son las que permiten explicar por qué ocurren terremotos, tsunamis y otros fenómenos naturales.

 

El descubrimiento de la pluma lo hizo la ingeniera Ángela María Gómez, doctora en Geociencias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), quien explica que “estos conductos son fósiles porque nos indican un proceso de hace 190 millones de años”.

 

En su tesis, la doctora Gómez tuvo un gran reto: entender la estructura de la tierra sólida en la región Caribe, donde el acceso a la información es limitado.

 

“El manto profundo, donde el material es mucho más caliente, debe tener algún conducto que comunique con la parte exterior, lo que se conoce como una ‘pluma del manto’. Esto nos dice que hay varios conductos que nos conectan a la tierra más profunda con la de la superficie trayendo material; luego, este se movió del Pacífico hasta su posición actual en el Caribe. Como dato especial, esta zona tuvo interacción de material muy caliente”, explica la doctora Gómez.

 

Este y dos hallazgos más fueron posibles gracias a una nueva metodología que la investigadora aplicó y que se conoce como “gravientes verticales”, un parámetro de la gravedad que es más sensible a variaciones superficiales de densidades.

 

Exploración de geopeligros

 

“Con esta metodología podemos identificar cómo estos terrenos que están juntos y migraron tuvieron orígenes diferentes, y además podemos ver las condiciones del subsuelo”, detalla la investigadora.

 

Con la nueva metodología identificó terrenos que no se habían descrito antes, información que se puede usar en cualquier lugar del mundo porque se basa en datos de libre acceso.

 

Además, con el hallazgo, la investigadora construyó el primer modelo termal de la región Caribe, lo que le permitió explorar otros geopeligros como las temperaturas en las que ocurren los terremotos y las zonas potenciales para la estabilidad.

 

A partir de la integración de datos geofísicos, de sedimentos oceánicos y continentales, del espesor de la corteza cristalina (la parte más externa y sólida de la Tierra) y otros datos como velocidades que viajan debajo de la corteza, se hace una tomografía del mapa.

 

Esta información se integra y se crea un modelo en tres dimensiones que la investigadora Gómez describe como “una torta en la que cada capa tiene materiales diferentes y por ende diferentes densidades”.

 

Como no contó con información medida in situ, decidió trabajar con bases de datos globales (recopilados en bases de datos públicas de acceso libre) y así construir modelos en tres dimensiones de la “torta”, que le permitieran entender mejor el estado de esta región en términos de distribución de densidad y temperatura.

 

“Debemos tener en cuenta que los satélites miden el campo de gravedad terrestre, que es una respuesta a la distribución de densidades de la Tierra y la usamos como un parámetro que mide esa torta para ver que hay allí abajo”, explica.

 

La ingeniera Gómez hace parte del German Research Centre of Geosciences (Alemania), donde trabaja en un posdoctorado.