Alimentación España , Zamora, Viernes, 10 de septiembre de 2004 a las 13:02

El aumento de más del 50% de la población de cigüeña blanca amenaza con dañar un gran número de iglesias en la provincia

Los nidos han pasado de 700 a 1.044 en dos años, y el Obispado ha solicitado ya la retirada de varios

AR/DICYT La población de cigüeña blanca se ha multiplicado en un 50% en Zamora. Sus nidos, que hace dos años llegaban a los 700 han aumentado hasta 1.044, según datos facilitados a DICYT por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, y se han convertido en una seria amenaza de daños en las iglesias de la capital y de la provincia. Los nidos, que pueden alcanzar una tonelada de peso, hacen peligrar la estabilidad de torres, espadañas, campanarios y, sobre todo, tejados. "Tenemos una queja mayoritaria de los párrocos", asegura Juan Luis Martín, vicario general de la Diócesis de Zamora.

Pero, si las iglesias, sobre todo las románicas, preocupan al Obispado, hay un templo donde convergen todas las miradas: la catedral. "Esta minada", afirma Juan Luis Martín. Cada atardecer se pueden contemplar sobre los pináculos, la torre o incluso sobre la propia cúpula más de 20 cigüeñas. El hecho de que las cigüeñas elijan las torres de las iglesias para realizar sus nidos no es una noticia nueva, pero "antes sólo estaban durante el verano, ahora se quedan prácticamente todo el año". Los vertederos a las afueras de las poblaciones suministran a estas aves el alimento suficiente "y los inviernos ya no son tan fríos como para tener que emigrar al Norte de Africa para pasar el invierno", explica Martín.

La cigüeña blanca o común (ciconia ciconia) dejó de estar fuera de peligro de extinción hace más de 10 años. Aún así, los nidos no se pueden retirar hasta que las crías son suficiente maduras como para abandonarlos y sobrevivir por su cuenta. La Junta de Castilla y León tiene regulado este punto, aunque reconoce que las necesidades de la Iglesia de mantener e buen estado sus monumentos. "Nosotros le recomendamos que soliciten el permiso a Medio Ambiente para retirar el nido cuanto antes", asegura Antonio Blanco, jefe del servicio territorial de Cultura en Zamora. Blanco reconoce que la población de cigüeñas es "inmensa, y ahora están aquí la mayor parte del año".


Pero el problema se acentúa si se espera demasiado a retirar el nido. "A veces la retirada en sí puede ser un problema, porque los nidos pesan muchísimo", asegura Blanco. Y pone como ejemplo el problema de la iglesia de Tábara (perteneciente a la Diócesis de Astorga) que ha llegado a tener cuatro nidos. Pero también ha habido desperfectos recientemente en San Cristóbal de Entreviñas, Montamarta y en la Iglesia de San Torcuato, donde el gran nido que suelen formar estas aves sobre la espadaña ha sido retirado en varias ocasiones.