El Museo de la Evolución Humana muestra la “luz” del yacimiento de Siega Verde-Foz Côa
CGP/DICYT María José Salgueiro, consejera de Cultura y Turismo, ha inaugurado hoy en el Museo de la Evolución Humana (MEH) de Burgos la exposición Vale do Côa y Siega Verde: El arte de la luz. Esta muestra, que comenzó su itinerancia en septiembre de 2010 en Salamanca para viajar después a al Monasterio de los Jerónimos en Lisboa y al Museo do Douro Peso da Régua, cierra ahora su recorrido en Burgos. La muestra tiene como objetivo dar a conocer de manera conjunta la singularidad de los grabados al aire libre más importantes de la península, situados en el conjunto del Valle del Côa y de la estación rupestre de Siega Verde, en Salamanca.
El título de la exposición hace referencia a la excelencia de estos restos que se encuentran al aire libre, en contraposición de los más conocidos que se localizan en el interior de las cuevas, pues hasta mediados de la década de los 90 del siglo XX, el arte paleolítico era considerado casi exclusivamente como un arte de las cavernas. Es por ello que el arte rupestre paleolítico al aire libre se puede denominar como el Arte de la Luz.
La exposición, que ha supuesto una inversión en torno a 200.000 euros, recurre a grandes fotografías, breves textos explicativos y recursos interactivos y audiovisuales para revelar un recorrido por la singularidad de los grabados, de estas manifestaciones artísticas, que constituyen una muestra excepcional del genio creativo en el inicio del desarrollo cultural del ser humano y permiten conocer la vida social, económica y espiritual del primer antepasado de la humanidad.
En este sentido, acercan al público las características de los yacimientos, su localización y relación con los cursos fluviales, las técnicas utilizadas, las especies reproducidas, su relación con otros conjuntos peninsulares y del mediodía europeo. Para ello se han instalado diferentes medios audiovisuales, entre otros la realización de un pasillo con suelo táctil, que permite al visitante comprender toda la complejidad técnica que ofrecen los grabados rupestres. Asimismo, imágenes proyectadas en la exposición y un breve vídeo que permiten transmitir al visitante tanto la singularidad de ambos conjuntos como el medio físico en el que se localiza.
Los yacimientos de Siega Verde fueron declarados por la Uunesco en agosto de 2010 Bien Patrimonio de la Humanidad, lo que elevaron la cifra de este tipo de declaraciones en Castilla y León a ocho: Atapuerca, la Catedral de Burgos, el Camino de Santiago, Las Médulas, las ciudades de Salamanca, Segovia y Ávila y Siega Verde. La exposición, que ha sido visitada hasta el momento por más de 60.000 personas, es una iniciativa coordinada entre la Junta de Castilla y León y el Instituto portugués de Gestão do Património Arquitectónico e Arqueológico Igespar IP y forma parte del Programa Operativo de Cooperación Transfronteriza España-Portugal.