Estudiarán la diversidad viral y bacteriana en aguas y especies de peces antárticos
USACH/DICYT Un estudio sobre diversidad viral y bacteriana en peces antárticos, que lidera el investigador del Centro de Biotecnología Acuícola (CBA) de la Facultad de Química y Biología, Dr. Marcelo Cortez, resultó ganador del Concurso Nacional de Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica en la Antártica, impulsado por el Instituto Antártico Chileno 2013.
En la iniciativa “Estudio de la diversidad viral y bacteriana en aguas y especies de peces antárticos: búsqueda de reservorios naturales de patógenos de salmónidos”, también participan los estudiantes del Doctorado en Microbiología de la Universidad, Claudia Robles-Planells y Daniela Toro-Ascuy y los investigadores Rubén Avendaño-Herrera (UNAB) y Javier González (Heidelberg University).
El equipo de investigadores enfocará sus estudios en el territorio antártico como posible reservorio natural de patógenos de salmones “dada la redistribución de los centros de cultivo cada vez más hacia zonas australes” y “la sorpresiva adaptación en condiciones de bajas temperaturas de los patógenos virales y bacterianos”, explica el investigador del CBA, Dr. Marcelo Cortez.
Agrega el científico que “a pesar de su aislamiento, el territorio antártico se encuentra a menos de mil kilómetros del Cabo de Hornos, pudiendo estar expuesto a virus de salmónidos, causando brotes infecciosos, los que muestran una inusitada virulencia a temperaturas por debajo de 8ºC”. En este escenario, el Dr. Cortez advierte que las corrientes oceánicas, la migración de peces infectados o de aves, pudiesen estar dentro de los factores que posibilitan que los patógenos virales “puedan migrar hacia zonas marinas antárticas y encontrar un nicho donde permanecer como reservorio”.
La investigación, que contempla dentro de sus objetivos establecer la diversidad de agentes virales a través del aislamiento e identificación de virus y bacterias en peces antárticos, aportará con información, por ahora desconocida, respecto al estudio de patógenos de peces en territorio antártico.
Para el Dr. Cortez, toda la información que derive del proyecto será “de gran utilidad para la industria salmonera, al proporcionar conocimiento del riesgo que pueda acarrear en la producción el que se sumen reservorios naturales de agentes patógenos en lugares oceánicamente relacionados con las nuevas zonas de producción de salmón, estas son las regiones de Aysén y Magallanes”, indica.
“Estamos frente a la oportunidad de contribuir con una investigación que tiene un carácter novedoso, al no existir reportes o publicaciones científicas que se enfoquen en temas relacionados con esta propuesta. En el caso de detectar y aislar agentes patógenos ya descritos en salmónidos, aportaremos importante información relacionada con el real impacto que la industria salmonera pueda estar generando en el ecosistema antártico”, remarca.
Este proyecto de investigación, se suma a la cartera de iniciativas que se ha adjudicado el Centro de Biotecnología Acuícola de la Universidad de Santiago, por lo se está dando un nuevo paso en la consolidación de este centro de investigación acuícola.