Alimentación España , Valladolid, Viernes, 15 de febrero de 2008 a las 17:22

La Comisi贸n Regional de Trasplantes da luz verde al Programa de Donaci贸n de Sangre de Cord贸n Umbilical

Ello incrementar谩 la disponibilidad de c茅lulas de progenitores hematopoy茅ticos para pacientes e investigadores

YG/DICYT La Comisión de Trasplantes de Castilla y León ha aprobado hoy el Programa Regional de Donación de Sangre de Cordón Umbilical (SCU), gracias al que los padres tendrán la oportunidad de poder donar la sangre de los neonatos, que según los expertos tiene determinadas ventajas sobre la médula ósea o la sangre periférica para el tratamiento de enfermedades hematológicas como las leucemias, así como sobre inmunodeficiencias y patologías metabólicas.

 

Según la información facilitada por la Junta de Castilla y León, con este programa se pretende aumentar la disponibilidad de células de progenitores hematopoyéticos para los pacientes que las necesiten, así como para fines de investigación; así como el almacenamiento de unidades de SCU dirigidas de manera específica a un trasplante inmediato o futuro de un familiar. El documento aprobado hoy organiza además todo el proceso de donación, recogida, transporte, preservación, almacenamiento y distribución de la sangre a la vez que contempla la necesidad de informar tanto a la población como a los profesionales sanitarios.
 

El control de todo el proceso, desde la donación hasta el transporte, el almacenamiento o el uso posterior, correrá a cargo del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León y de la Coordinación Autonómica de Trasplantes. Así, una vez extraída la sangre de cordón umbilical en el hospital la muestra se transportará debidamente protegida al Centro de Hemoterapia, que será el encargado de analizar y validar la sangre donada y de enviarla a continuación al banco de referencia seleccionado.

 

Una vez que la madre haya decidido donar la sangre del cordón umbilical de su hijo, se le realizarán análisis entre el parto y los siete días posteriores, que se repetirán seis meses después. El recién nacido será evaluado también tras el parto y seis meses después, con el fin de descartar enfermedades que harían retirar la unidad de sangre obtenida.


Según contempla al Programa, podrá ser donante toda mujer embarazada mayor de 18 años cuyo parto tenga lugar en un centro autorizado y que no presente riesgo de enfermedad infecciosa, genética ni tumoral susceptible de transmisión al receptor, y que no presente inestabilidad mental, intoxicación por alcohol o narcóticos.

 

La sangre procedente del cordón umbilical será usada para el tratamiento de enfermedades adquiridas, como por ejemplo los diferentes tipos de leucemia, el linfoma de Hodgkin, el Síndrome mielodisplásico o la aplasia medular, así como en enfermedades congénitas, como por ejemplo la inmunodeficiencia congénita combinada, la drepanocitosis, la talasemia mayor o la linfohistiocitosis hemofagocítica.

 

La sangre no obstante podrá ser empleada en otras personas anónimas -donación alogénica- que precisen la realización de un trasplante o podrá conservarse para ser usada por un familiar en primer grado -donación dirigida- con determinada enfermedad y que cuente con una indicación médica concreta. Según ha precisado la Junta, por el momento no se plantea la creación de un banco propio de SCU, ya que con los 7 que existen actualmente de da suficiente cobertura para poder almacenar todas las unidades que se extraigan.


La sangre del cordón umbilical contiene gran cantidad de células especializadas que permiten la renovación de las células sanguíneas. Si estas células son trasplantadas a determinados pacientes cuya médula ósea se encuentra enferma, pueden obtenerse prometedores éxitos terapéuticos.

 

Programa de trasplantes de páncreas y páncreas-riñón

 

Junto a este programa, la Comisión Regional de Trasplantes ha autorizado también la puesta en marcha del programa de trasplante de páncreas y páncreas-riñón, destinado a mejorar la calidad de vida de pacientes diabéticos y los que padecen insufiencia renal añadida. El Complejo Asistencial de Salamanca será el encargado de desarrollar este programa, que se une a los ya existentes en la comunidad autónoma de riñón, hígado, corazón, córneas, tejidos osteotendinosos o progenitores hematopoyéticos.

 

 

La previsión es comenzar este año de forma gradual, con alrededor de cuatro implantes, para a partir del año 2009 alcanzar una cifra media anual entre 6 y 8, ya que Castilla y León es autosuficiente en la obtención de estos órganos.