La exposición prolongada a sonidos superiores a 85 decibelios produce pérdida de audición

CGP/DICYT La pérdida de audición provocada por altos niveles sonoros es consecuencia de una exposición prolongada a ruidos que superan los 85 decibelios, los que se alcanzan en un grito o al enchufar un aspirador. Con el objetivo de concienciar a la población en la importancia de proteger sus oídos, en la jornada de hoy se celebra el Día Mundial contra el Ruido. En el caso de Valladolid, entre los actos preparados se encuentra el reparto de protecciones auditivas entre los ciudadanos y el asesoramiento en materia de prevención.

Del mismo modo, la exposición Inaudito, la aventura de oír, que se puede visitar en el Museo de la Ciencia hasta el próximo 9 de mayo, también quiere contribuir a la sensibilización de la población sobre los peligros del ruido en este día. Se trata de la primera muestra dedicada al sentido del oído que se realiza en el país.

Se calcula que más de nueve millones de españoles soportan cada día unos niveles medios de ruido que superan el límite aceptable establecido en 65 decibelios por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En este sentido, España ocupa la segunda posición en el ranking de los países más ruidosos por detrás de Japón. El exceso de ruido puede provocar diversos trastornos de salud. Los expertos alertan que en las últimas décadas los niveles de ruido han aumentado de forma alarmante, un problema que no pasa desapercibido para la mayoría de la población. Según un estudio realizado por GAES, un 87 por ciento de los españoles considera que vive en un país ruidoso.

Del mismo modo, según la información recogida por DiCYT, nueve de cada diez españoles considera que no estamos suficientemente concienciados y no ponemos las medidas necesarias para reducir los altos índices de sonido. Un hecho que puede afectar la calidad de vida y tener efectos sobre la salud. Así lo refleja el 28 por ciento de los encuestados, quienes declaran que el ruido altera en gran medida su estado de ánimo. La exposición a sonidos que superan los índices saludables puede provocar pérdida auditiva. Además, el ruido puede generar diversos trastornos como insomnio, irritabilidad, dolor de cabeza, estrés, hipertensión, fatiga o un mayor riesgo cardiovascular.

Un problema prevenible

Cuanto más alto sea el nivel de ruido más rápido se desarrollará el trastorno auditivo y existen más posibilidades de que sea irreversible. La pérdida auditiva también puede ir acompañada de otros trastornos como tinnitus, una especie de silbidos o ruidos en la cabeza. No obstante, la pérdida de audición por ruido es cien por cien prevenible. Los expertos recomiendan conocer los decibelios de los ruidos que nos rodean para saber cuáles pueden ser una agresión para los oídos.

Del mismo modo, es importante someterse a revisiones auditivas periódicas con un especialista. En muchas ocasiones, la persona afectada se acostumbra al ruido y no se da cuenta de la pérdida de audición. Algunos de los primeros síntomas que aparecen son la distorsión de los sonidos o la dificultad para comprender las palabras.

Las obras, el ruido más odiado

El informe elaborado por la firma especializada en audición pone de manifiesto que las obras (49’4 por ciento), el ladrido de un perro (25’3 por ciento), el camión de la basura (24’6 por ciento) y el tráfico (24’1 por ciento) son los sonidos que más molestan a los españoles en su día a día. La calle es el entorno donde somos más conscientes del ruido que nos rodea. Un 65 por ciento de la población reconoce que es el lugar donde se siente más agobiado por la contaminación acústica. La noche es otro de los momentos más conflictivos, ya que casi el 46 por ciento reconoce oír ruidos cuando va a dormir.