Ciencias Sociales España , Salamanca, Lunes, 27 de marzo de 2017 a las 19:58

La Gran Historia, el proyecto que busca la unión de todas las disciplinas científicas

Conferencia en la Universidad de Salamanca sobre una nueva aproximación al conocimiento apoyada por Bill Gates para entender todos los fenómenos

JPA/DICYT Olga García Moreno, investigadora de la Universidad de Oviedo, ha presentado hoy en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Salamanca el proyecto La Gran Historia, una nueva aproximación al conocimiento que trata de unificar todas las disciplinas desde un punto de vista interdisciplinar basado en evidencias científicas. 

 

“Nutriéndonos del conocimiento de todas las disciplinas ya establecidas, de ciencias y de humanidades, intentamos crear un nuevo mapa del conocimiento abarcando todo el tiempo, desde el Big Bang, la gran explosión que originó el Universo, hasta ahora”, explica la científica en declaraciones a DiCYT. “La Gran Historia quiere estructurar la manera de integrar todos los datos que tenemos acerca del pasado”, agrega.

 

De hecho, para entender algunos acontecimientos es imprescindible romper barreras entre distintas disciplinas científicas. Un buen ejemplo es que los dinosaurios y la mayoría de las especies de su época se extinguieron por el impacto de un meteorito. En este hecho, “el régimen del cosmos interacciona con el régimen de la vida y de la Tierra”, comenta la investigadora.

 

Además, las interacciones también saltan a otras disciplinas del campo de las humanidades, como la historia. Olga García Moreno, que es geóloga, pone el ejemplo de la Revolución Francesa, que pudo estar influida en gran parte por un fenómeno volcánico ocurrido años antes. En 1783 la erupción del sistema volcánico islandés de Grímsvötn provocó unas emisiones de gases y partículas a la atmósfera tan fuertes que taparon los cielos europeos, acabando con las cosechas de aquel año. Como consecuencia, provocó una gran hambruna que precipitó en Francia el malestar social y la consiguiente revolución.

 

La Gran Historia trata de enlazar acontecimientos a través del concepto de complejidad y analiza cómo dicha complejidad ha ido aumentando desde las formas más sencillas que aparecieron tras el Big Bang hasta la actual sociedad humana.

 

Sin embargo, el intento de La Gran Historia de borrar las fronteras entre las especialidades no significa que renuncie a las mismas, sino que se nutre de ellas. “Han hecho que el avance científico y tecnológico haya llegado al punto en el que estamos en la medicina y en la exploración espacial, pero es el momento de romper las barreras que separan las distintas disciplinas para seguir avanzando”, comenta la investigadora.

 

Dentro de este movimiento hay una rama más teórica, que trata de ver cómo construir este nuevo conocimiento. En cambio, otros “grandes historiadores” se dedican a su aplicación, sobre todo en el campo de la enseñanza, porque esta nueva aproximación al conocimiento constituye una gran herramienta pedagógica. “En la educación preuniversitaria los estudiantes pierden la noción de lo que estudian, porque lo hacen de manera aislada en asignaturas estanco. Sin embargo, en Estados Unidos y Australia ya se están llevando estas ideas a los institutos para que los alumnos encuentren una nueva motivación al poder interrelacionar todo el conocimiento que adquieren”, comenta.

 

Asimismo, hay profesionales que se dedican a construir La Gran Historia desde su disciplina, por ejemplo, “los geólogos tratamos de ver cómo ciertos procesos geológicos pueden haber influido sobre la Humanidad”.

 

El apoyo de Bill Gates

 

Los pioneros de esta iniciativa fueron David Christian, de la Universidad de Macquarie, en Sidney (Australia), que empleó el término Big History por primera vez, y Fred Spier, de la Universidad de Amsterdam, que comenzó a aunar las disciplinas en un solo curso interdisciplinar para explicar todo el pasado. Ahora, la colaboración con Bill Gates ha hecho posible el Big History Project, que ofrece materiales online gratuitos para profesores y estudiantes. En España, la Universidad de Oviedo trata de divulgar la idea.

 

“Uno de los objetivos de La Gran Historia es prepararnos para el futuro. Si queremos crear modelos para el porvenir, debemos entender bien el pasado teniendo en cuenta los procesos a escala global en el tiempo y el espacio, porque si no, habrá variables que se queden fuera de los análisis”, señala la investigadora.

 

La clave para conseguirlo, en un mundo ya tan especializado, será la colaboración. “Cada vez son más necesarios los estudios interdisciplinares. Las publicaciones más relevantes ya son interdisciplinares, el futuro de la investigación está en ello. Deberíamos apostar por ello en la formación, tener un curso para formar a los estudiantes para que en un futuro se puedan dedicar a la investigación con más amplitud de miras”, opina.