La investigadora Elena Llano expone en Salamanca un estudio sobre genes supresores de tumores
JPA/DICYT El Centro de Investigación del Cáncer (CIC) ha analizado hoy un reciente estudio sobre genes supresores de tumores, en concreto, sobre un gen denominado Ris1 que los científicos habían relacionado con este proceso. La investigadora Elena Llano, incorporada a este centro salmantino hace un año, ha explicado en una conferencia el trabajo que realizó con anterioridad en este campo de investigación en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).
"La supresión tumoral es un fenómeno que protege al organismo del desarrollo de tumores", ha declarado a DICYT Elena Llano. Por ejemplo, si en una célula se produce la activación de un oncogen, es decir, de uno de los genes responsables de la transformación de una célula normal a una cancerígena, la célula responde por la vía de la senescencia, un proceso de envejecimiento, o por la vía de la apoptosis, la muerte celular autoinducida, de esta forma el organismo se protege de la proliferación del tumor. "Sin embargo, si alguna de las rutas de estas dos vías se encuentra alterada, la célula puede seguir hasta convertirse en una célula alterada y dar lugar al tumor. Por eso, nos parecía un trabajo muy interesante basado en la supresión tumoral que se produce en respuesta a la activación de los oncogenes", ha señalado.
Finalmente, los investigadores del grupo del CNIO del que formaba parte Elena Llano y que estaba liderado por Manuel Serrano no consiguieron demostrar que el Ris1 sea un gen supresor de tumores. "Quizá sea simplemente sea un marcador que se produce en respuesta a esta activación de los oncogenes", estima. "Sin embargo, todos los datos que encontramos al principio lo daban como un claro candidato a ser supresor, ya que se encontraba en una región del genoma que se encuentra eliminada en muchos tumores sólidos, una región que se sabe que tiene actividad supresora de tumores y que cuenta en total con diez genes, aunque no se conocen las funciones específicas de ninguno de ellos", afirma.
Por eso, aunque la investigación no dio los resultados esperados, sí ha servido al menos para descartar a uno de los genes que podrían tener la función de supresor de tumores, de manera que ahora es posible continuar en la misma línea de investigación con el resto, según ha explicado Elena Llano, que en la actualidad trabaja en el Laboratorio 9 del CIC, junto a Alberto Martín Pendás.