Los emprendedores de la Universidad de Valladolid transmiten su experiencia en un libro
CGP/DICYT Juan José Mateos, consejero de Educación; Juan Casado, director general de Universidades, y Evaristo Abril, rector de la Universidad de Valladolid, han presentado hoy el libro Soy emprendedor UVA, en el que 16 jóvenes titulados y docentes relatan su experiencia en la puesta en marcha proyectos empresariales en sectores tan variados como el comercio electrónico en el sector vitivinícola, la ingeniería ambiental o la filosofía organizacional. El objetivo de la publicación, ha señalado Mateos, es demostrar a la comunidad universitaria que se pueden constituir empresas en base al valor añadido que generan los conocimientos académicos adquiridos.
El libro forma parte del proyecto de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa (T-CUE) de la Junta de Castilla y León. Según el consejero, en las universidades de Castilla y León “además de formar licenciados y diplomados se forma a investigadores y, en los últimos años, a emprendedores”, un perfil que la comunidad “necesita”. En este sentido, ha destacado que la “importante” inversión que ha supuesto el proyecto T-CUE “empieza a dar resultados”. “La experiencia que se ha presentado es el dato objetivo de que la Universidad de Valladolid está contribuyendo a formar emprendedores”, ha concluido.
Por su parte, Evaristo Abril ha recordado que el apartado de emprendedores es un “reto” para la Universidad de Valladolid. “La mentalidad de los universitarios no se cambia de la noche a la mañana y lo que hemos demostrado con este libro es que con la formación actual y ayudas suplementarias se puede formar emprendedores”, ha puntualizado.
Siete empresas constituidas
En cuanto a los resultados obtenidos tras dos años de la puesta en marcha del Parque Científico, el rector los ha calificado de “satisfactorios” con más de 150 participantes en las distintas iniciativas impulsadas, 75 proyectos de empresa presentados, 60 planes de negocio, siete empresas de base tecnológica constituidas y otras tantas “con otra connotación”. En la misma línea, ha resaltado que la iniciativa no sólo se ha limitado a Valladolid, sino que una de las spin-off ha salido del campus de Palencia. Otro aspecto importante, a su juicio, es que “no solo se han creado empresas de base tecnológica, también en otros campos como el de las humanidades”. “Aunque uno pueda pensar que la transferencia de conocimiento tenga un cierto carácter científico o tecnológico, no es exclusivo, también desde otros ámbitos se pueden tener ideas emprendedoras”, ha añadido.
Durante el acto de presentación del libro, Beatriz de la Parra, gerente de la spin-off ECM Ingeniería Ambiental, ha contado su experiencia a los asistentes. Se trata de la única empresa de base tecnológica surgida hasta el momento del campus de Palencia, aunque es una de las más activas. “Llevamos a cabo proyectos de ingeniería relacionados con la micología y sobre restauración de riberas y ríos”, ha explicado la emprendedora, quien ha detallado que se encuentran inmersos en un proyecto de ordenación micológica en varios municipios de las provincias de Lugo y Orense, encargado por la Xunta de Galicia, así como en un trabajo sobre la viabilidad de apertura de un camino natural por el valle del Tiétar.