Tecnología México , Baja California, Lunes, 16 de enero de 2012 a las 12:07

Nuevo enfoque paradigmático de la energía y economía global

La reducción del consumo energético es necesario y requiere un cambio

CICESE/DICYT Los combustibles fósiles han permitido un avance espectacular en todas las áreas de desarrollo en los últimos 150 años: economía, nivel de vida, ciencia, tecnología, transportación, etcétera. Sin embargo, son un recurso finito. Como sociedad humana, tenemos poco tiempo para realizar la transición hacia una economía que no dependa tanto del petróleo, recurso que se ha agotado en sus formas fáciles de extracción. Es urgente enfrentar esta realidad -que no es placentera- y ver el problema. El resolverlo llevará a tener una transición que maximice las potencialidades de desarrollo y no desestabilice de manera drástica la economía mundial.

 

El Dr. Luca Ferrari, jefe del Departamento de Geología Regional en el Instituto de Geología de la UNAM, al impartir dos seminarios en el CICESE abordando la historia, el presente y futuro de las energías usadas por el ser humano para su desarrollo y transformación, hizo un análisis exhaustivo sobre el futuro de las energías disponibles para la humanidad y su relación con la economía mundial.

 

El Dr. Luca Ferrari fue invitado por la Dra. Margarita López, responsable del laboratorio de geocronología de la División de Ciencias de la Tierra del CICESE –con quien ha colaborado durante años- y, de entrada, estableció que un ajuste como el planteado puede llevar décadas hasta su adopción, pues esta transición requiere de políticas publicas y de acciones en las que cada persona puede contribuir, por ejemplo, utilizando menos el automóvil, comprar más productos que no involucren tanto consumo de combustibles para su traslado y preservación, o instalar en casa calentadores de agua solar, acciones que, además, ayudan a la economía local y familiar.

 

La visión critica del sector energético y académico, gente que ha trabajado en la industria petrolera, geólogos, ingenieros que saben cuáles son los recursos con los que contamos y las dificultades para producirlos, también han analizado que sustituir el petróleo con energías renovables no es cosa trivial. La conclusión a la que llega este gremio es que resulta prácticamente imposible sostener el ritmo de consumo energético actual utilizando sólo fuentes renovables. Pero la solución no es fácil, ya que se requiere un cambio estructural de la economía y de los estilos de vida que tenemos actualmente.

Correlación directa entre economía, energía y emisiones de CO2

Ya en los años setenta hubo dos choques petroleros del precio por razones geopolíticas, en 1973 y 1979. Sin embargo, después, en los años ochenta, se descubrieron los últimos grandes campos, por ejemplo en el Mar del Norte, en Alaska. Así, el petróleo regresó a precios relativamente bajos de 20 dólares por barril. Pero durante la década pasada, se incrementó el precio hasta llegar en 2008 a 138 dólares el barril. Eso provoco la recesión de 2008-2009; luego bajó el precio nuevamente hasta hoy día, donde estamos en poco más de 100 dólares por barril.

En la curva de crecimiento de la población mundial se observa que hasta que la sociedad humana no tuvo acceso a los combustibles fósiles se mantuvo algo constante. Desde que se usa carbón y hay acceso al petróleo ha habido un crecimiento exponencial de la población, llegando hoy día a 7 mil millones de habitantes en el planeta. Con una tasa de duplicación muy alta; la población se incremento 14 veces desde la revolución industrial y siete veces desde que usamos petróleo.

El petróleo existirá probablemente por muchas décadas en el planeta. Sin embargo, hemos usado la primera mitad. Este es el crudo de mejor calidad, más fácil de extraer y menos costoso, es decir, el que genera mayor ganancia.


Conclusiones

Las conclusiones a las que llega el Dr. Luca Ferrari son que la reducción del consumo energético es muy necesaria y se requiere un cambio de paradigma. Ponerse de acuerdo respecto a una mejor distribución de los recursos planetarios para todas las sociedades humanas por igual. Se necesita una nueva visión de los economistas respecto a que la economía debe crecer de manera infinita. Respecto a México, ya se requiere un planteamiento sólido hacia la transición energética y nuestro país requiere invertir en fuentes renovables. La conclusión principal es que resulta imposible sostener el ritmo de consumo actual con las energías no renovables solamente, se necesita un decrecimiento ordenado, propuestas de energías renovables sustentables y una mejor distribución de los recursos.