Nuevo parque marino de Chile en el Pacifico Sur
CHC/DICYT “Chile tendrá uno de los mayores parques marinos de nuestro planeta”, anunció el Presidente Sebastián Piñera el 28 de septiembre, en noticias ilustradas con un gráfico que mostró la ubicación del islote Salas y Gómez, un punto oceánico distante 3.500 km del continente. En realidad, son dos rocas de naturaleza volcánica, sin vegetación ni fauna terrestre, unidas por una estrecha franja que apenas sobresale del agua. En total, el conjunto mide 700 metros de longitud y su mayor altura es de 30 metros. No hay vertientes de agua dulce, salvo el apozamiento de las lluvias del área subtropical.
El doble bautizo geográfico identifica a José Salas, descubridor del islote en 1793, y José Manuel Gómez, su primer explorador en 1805. Cabe suponer que ambos navegantes se dirigían a la isla de San Carlos, nombre que los españoles dieron en 1770 al mismo territorio que los holandeses habían descubierto y denominado Paasch Eiland en Pascua de Resurrección de 1722.
Salas y Gómez fue anexado a la antigua Capitanía General de Chile, y en el período republicano formó parte de la incorporación de Rapa Nui, Isla de Pascua, a la soberanía chilena en 1888. En estas condiciones, el islote fue declarado Santuario de la Naturaleza mediante decreto del Ministerio de Educación en 1976. No obstante, la tuición del Consejo de Monumentos Nacionales ha mantenido el santuario con doble mérito, histórico y legal, pero sin recursos económicos para aplicar un plan de manejo. De ahí la importancia del anuncio actual que coincide con la creación del Ministerio del Medio Ambiente.
Biodiversidad oceánica
El senador Antonio Horvath, comisión de Intereses Marítimos, contactó en julio último a los participantes en la exploración de Salas y Gómez que realizaron la Fundación Oceana y National Geographic en marzo 2010. Por primera vez se utilizó entonces un robot que filmó parcialmente la biodiversidad alrededor de los montes submarinos adyacentes al islote en la placa de Nazca.
La documentación, accesible en la Biblioteca del Congreso, también contiene informes del crucero CIMAR 6, efectuado por el buque oceanográfico “Vidal Gormaz” en octubre de 1999, con académicos universitarios que ampliaron el conocimiento de Salas y Gómez. Hasta ahora, por ejemplo, se registran 226 invertebrados marinos y 170 peces, entre los cuales destacan los atunes, el pez espada, la vidriola, el jurel y los tiburones, cuya voracidad es un indicador de la abundancia de alimento acuático…
En función de su pequeñez y características inhóspitas para colonizadores humanos, el islote ofrece la mejor alternativa de descanso y nidificación de aves marinas en una extensa zona del Pacífico Sur. La riqueza ornitológica incluye gaviotines, fardelas, piqueros, golondrinas de mar y especies tropicales de vistoso plumaje, un atributo estético que provocó la captura de muchos ejemplares con diversos fines, incluso mitológicos. “Motu Motivo Hiva”, en lengua rapanui, significa “Islote del pájaro en camino a Hiva”, en referencia a tradiciones de la Polinesia.
Salvaguardia ambiental
Varias expediciones oceanográficas han observado trozos de redes y boyas a la deriva que evidencian faenas de pesca efectuadas en el entorno de Salas y Gómez. Tales actividades se apoderan de recursos de la Zona Económica Exclusiva de Chile y afectan el ecosistema insular.
En consecuencia, los antecedentes reunidos por el gobierno fueron apoyados por la Fundación Mundial de Vida Silvestre, WWF, en orden a darle categoría de Parque Marino a dicho islote, lo cual excluye toda intervención que no sea de estudios legalmente autorizados.
Por último, el anuncio del Presidente Piñera se concretó mediante el decreto Nº 235 del Ministerio de Economía que crea el parque marino "Motu Motiro Hiva" de Salas y Gómez, con superficie de 150.000 km2 en sus playas, rocas, biota acuática y fondos de mar.
Además, el nuevo decreto encomienda al Servicio Nacional de Pesca supervisar y coordinar las acciones de administración del área indicada, lo cual implica que el gobierno destinará recursos especiales para cumplir tan extraordinaria tarea, a gran distancia del litoral continental de Chile.