Nuevos datos sobre la vida precolombina en un área poco estudiada de la Amazonia
DICYT - Los pueblos precolombinos de un área al suroeste del Amazonas no bien documentada hasta la fecha, alteraron significativamente el paisaje miles de años antes de lo que se pensaba. Un estudio publicado en la revista ‘PNAS’ aporta evidencia de personas que utilizaron el fuego y prepararon el paisaje para la agricultura y la pesca hace más de 3.500 años. Estos hallazgos rebaten la noción, a menudo sostenida, de un Amazonas prístino durante la época precolombina antes de la llegada de los europeos a fines del siglo XV.
El estudio, encabezado por investigadores de la Universidad Central de Florida (Estados Unidos) y la Universidad Northumbria (Reino Unido), en estrecha colaboración con el Ministerio de Culturas de Bolivia, la Unidad Nacional de Arqueología y Museos, el Museo Regional Arqueológico "Yacuma" e investigadores y estudiantes de la Universidad Mayor de San Andrés, en La Paz, también proporciona pistas sobre el pasado de las diversas culturas que viven en el área conocida como los Llanos de Mojos, en el noreste de Bolivia.
"Esta región tiene una diversidad de idiomas de las más elevadas del mundo, lo que refleja distintas formas de vida y herencia cultural", asegura el coautor del estudio John Walker, profesor asociado en la Universidad Central de Florida. Pero poco se sabe de la historia de estas poblaciones en los últimos 3.000-4.000 años.
Los investigadores esperan escribir esta historia a partir de las actividades económicas que practicaron estos pueblos. El paisaje llano de los humedales de los Llanos de Mojos se utiliza hoy para la cría de ganado, pero los arqueólogos habían observado evidencia de campos agrícolas elevados y presas para la acuicultura de época precolombina.
Investigaciones anteriores apuntaban a la fecha del 300 después de Cristo, o hace unos 1.700 años. Sin embargo, el nuevo estudio combinó la experiencia de múltiples disciplinas, como la antropología, la paleoetnobotánica y la paleoecología, para determinar que la gestión intensiva de la tierra comenzó mucho antes, alrededor del 1.500 antes de Cristo, hace unos 3.500 años.
"Este hallazgo es importante porque proporciona evidencia de que la Amazonía no es una naturaleza virgen, sino que ha sido moldeada y diseñada por indígenas miles de años antes de la llegada de los españoles", afirma Walker.
Restos de maíz y calabaza
El equipo de Neil Duncan, autor principal del estudio y paleoetnobotánico en Florida, extrajo dos núcleos de tierra de cinco pies de largo de dos ubicaciones separadas 13 millas en los Llanos de Mojos.
Al examinar estas muestras, Duncan encontró fitolitos de maíz y calabaza que databan del 1380 antes de Cristo y del 650 antes de Cristo, hace unos 3.000 años. Los fitolitos son partículas microscópicas de sílice de tejido vegetal, y los hallazgos sugieren que se trataba de productos cultivados en los numerosos campos elevados localizados en el área.
Colegas de la Universidad de Northumbria examinaron las mismas muestras en busca de carbón, polen y diatomeas, que son algas unicelulares indicativas de ambientes acuáticos. Ambos núcleos mostraron tendencias similares: condiciones secas inicialmente en las capas más antiguas de la tierra, seguidas de un aumento de las condiciones de humedad y un mayor uso de la quema de madera, como demuestra la presencia de altas concentraciones de diatomeas y carbón, respectivamente.
"La intensificación en el manejo de plantas, fuego y agua ocurrió al mismo tiempo, lo que enfatiza que la agricultura y la pesca eran igualmente importantes para la gente de la región", agrega Bronwen Whitney, también del equipo de Florida.
Los investigadores tienen previsto ahora analizar la función, la historia y el papel de las presas de peces del área, aplicar nuevas técnicas para fechar los cambios en el uso de la tierra y reconstruir una historia agrícola más detallada para la región.