Paleontólogo argentino descubre el lagarto más antiguo del continente africano
CONICET/DICYT A veces lo que uno busca está más cerca de lo imaginado. El investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) Sebastián Apesteguía, acaba de descubrir a Jeddaherdan, el primer y más antiguo lagarto acrodonte del Cretácico de África -y el más antiguo iguanio del continente, de 90 millones de años-. Sin embargo, el hallazgo paleontológico no sucedió como podríamos imaginarlo: no fue en medio de una campaña ni en un lugar remoto, a campo traviesa, entre herramientas o en condiciones inhóspitas. Fue insólito: Apesteguía lo halló revisando las colecciones de fósiles en los cajones del lugar donde trabajaba, el Museo de Historia Natural de París.
La historia fue así: durante los años `50, el famoso paleontólogo francés René Lavocat realizó campañas al desierto marroquí hallando enormes cantidades de materiales que fueron transportadas al Museo de Historia Natural de Paris. Muchos fueron estudiados y publicados hace décadas, mientras que otros, tal vez más raros, permanecieron olvidados en los cajones del lugar.
En el año 2009, gracias a un proyecto financiado por la Mairie de Paris -destinado a la puesta en valor de las colecciones de su principal museo-, el doctor Apesteguía –que dirige el Área de Paleontología de la Fundación de Historia Natural “Félix de Azara” (CEBBAD, CONICET), que funciona en la Universidad Maimónides- fue hasta allí a trabajar en su tema principal, los esfenodontes, y se encontró con lo inesperado: halló, perdida entre los restos de peces fósiles, a la pequeña mandíbula de Jeddaherdan. El trabajo científico fue publicado en el último número de la prestigiosa revista científica Royal Society Open Science.
Los acrodontes
Según explica el investigador, los lagartos son más antiguos que los dinosaurios: se originaron a principios de la Era Mesozoica, hace unos 240 millones de años. Y ¿quiénes son los iguanios? Son un grupo de lagartos extraordinariamente diverso, con más de 1.700 especies en todo el mundo, que incluye a los cameleones, anolis, matuastos y casi todas las lagartijas de tierra que vemos en los campos de la Argentina.
Dentro de los iguanios existen varios grupos. La mayor parte de ellos tienen sus dientes alojados en un surco de la mandíbula, salvo los acrodontes, que desarrollaron dientes fuertemente adheridos al borde de esta. Hoy viven en muchos lugares del mundo, en especial África y Asia. Entre ellos, se encuentran los camaleones, las agamas, los lagartos voladores y los clamidosaurios.
La historia fósil de los acrodontes incluye varios hallazgos de hasta 40 millones de años de antigüedad, o sea, de mediados de la Era Cenozoica; sin embargo, los últimos dos años proveyeron información revolucionaria para el grupo: primero –en 2015- fue el hallazgo de Gueragama, un acrodonte del Cretácico de Brasil, y ahora, el descubrimiento de Jeddaherdan.
Los hallazgos de lagartos acrodontes para el Cretácico Superior de Brasil y Marruecos son notables. Destacan la presencia de minúsculos herbívoros que vivían a la sombra de los más enormes dinosaurios, demasiado pequeños para preocuparse de ser comidos, pero atención: no de ser pisados.
Al hallar los restos, Apesteguía consultó con el especialista en lagartos fósiles del museo de Paris, el Dr. Rage, quien corroboró la identificación. Luego, se sumaron los paleo-herpetólogos Juan Daza y Tiago Simões, formando finalmente el equipo que transformaría un pequeño resto en un cajón de un museo en el más antiguo lagarto iguanio del África.