Alimentación España , Palencia, Lunes, 03 de octubre de 2011 a las 17:19

Un nuevo sistema permite proteger las semillas de los predadores en los trabajos de reforestaci贸n

El invento, que est谩 en proceso de patente, ha resultado efectivo ante los ataques de peque帽os roedores y jabal铆es a zonas que han sido repobladas

Cristina G. Pedraz/DICYT En muchas ocasiones, las repoblaciones forestales con especies cuyas semillas son grandes, como las bellotas, tienen unos altos niveles de fracaso debido a la acción de predadores como los roedores (ratones, topillos, conejos) y de los jabalíes. Como explica José Reque, miembro del Instituto Universitario de Investigación en Gestión Forestal Sostenible y profesor de la Escuela de Ingenieros Agrónomos de Palencia, estas semillas “resultan muy atractivas para la fauna, que arrasa con ellas”, por lo que su acción “es el principal limitante de la repoblación”.


En el mercado existen diversos productos para proteger a la semilla o a la joven planta de los predadores, aunque ninguno de ellos se muestra eficiente para frenar a todos estos animales, especialmente a los jabalíes. Tras varios años de trabajo, José Reque y Eduardo Martín, agente medioambiental de la Junta de Castilla y León, han logrado desarrollar un prototipo que mantiene intacta a la semilla pese el ataque de roedores y jabalíes.


Se trata de un protector de fácil construcción basado en una malla metálica biodegradable de forma cilíndrica cuya parte inferior (la que va fijada a la tierra) tiene una forma de embudo que encapsula a la semilla. Asimismo cuenta con un anillo metálico que, además de fijar mejor el protector al suelo para que no se caiga, permite ahuyentar al animal. Otra de las novedades de diseño de este protector se encuentra en su interior. Para evitar que los roedores trepen por la malla y puedan alcanzar a la semilla, han introducido una agalla (como la que puede encontrarse en cualquier monte) sujeta con los mismos alambres de la malla doblados, con el fin de aislar a la semilla.


“El protector se puede construir manualmente en unos cinco minutos”, aseguran los expertos, quienes detallan que si se acercan los roedores “intentan bajar hasta donde está la semilla pero chocan con el anillo, que le da estabilidad al protector, y si trepan por arriba se topan con la agalla, que le molesta la entrada”.

 

Del mismo modo, ante el ataque de un jabalí, “capaz de arrasar repoblaciones de 4-5 hectáreas en una sola noche”, al morder el protector se pica con la malla, la aplasta y no puede acceder a la semilla, que queda más atrapada. “Al ver que pierde mucho tiempo y energía, el jabalí ‘memoriza’ que la semilla está en una cápsula y que no puede sacarla, por lo que desiste”, añaden.


En proceso de patente


Dada la efectividad del protector desarrollado, sus promotores han decidido patentarlo. “En repoblación bajo pinos, se ha obtenido del orden del 83 por ciento de supervivencia y, en una ladera sin cobertura de árboles, llegamos a un éxito del 50 por ciento, con un coste mínimo”, aseguran. De hecho, en la misma ladera donde se están realizando los ensayos, “hay repoblaciones de pinos con fracasos del 80 por ciento”.


Según señalan los investigadores, en los años 50 se hicieron diversas repoblaciones sobre terrenos desnudos del Cerrato, donde se encuentran las parcelas experimentales, y la idea ahora “es introducir frondosas para hacer los montes más diversos, naturales y adaptados al territorio”. En este sentido, frente a otro tipo de repoblaciones que utilizan plantas de vivero ya germinadas, “con este sistema se pueden plantar semillas autóctonas de la comarca que ya están adaptadas a las condiciones de este suelo”.


Otra de las ventajas que conlleva el sistema ideado, precisan, es que los costes se reducen considerablemente. Además de que la malla metálica que se emplea puede encontrarse en cualquier ferretería a un precio económico, “mientras que los protectores más sencillos que hay en el mercado cuestan del orden de 4-5 euros”, utilizar las semillas que se encuentran en el campo reduce también la factura, “ya que las plantas de vivero suelen costar unos 40 céntimos”.


Por otro lado, Reque recuerda que instalar el protector no requiere ninguna maquinaria, puesto que solo hay que realizar un hoyo manual de unos 60 centímetros de diámetro y poco fondo. En cuanto a la malla metálica, al no estar soldada y ser biodegradable “no constriñe ni daña a la planta”.
15 años de trabajo


El actual protector tiene su origen hace 15 años, como detalla Eduardo Martín. “Vimos que existía una laguna en cuanto a la siembra directa de semillas con diámetro parecido al de una bellota debido a la acción de los predadores. Así, empezamos a crear modelos en función de cómo iba reaccionando el animal. Si se comía la bellota por un espacio determinado lo modificábamos, hasta que hemos llegado a este prototipo, que es bastante efectivo porque evita el ataque de diversos animales”, subraya.


Reque y Martín aún no han decidido qué harán cuando la patente se conceda, si ponerla en explotación comercial o guardar los derechos y divulgarlos libremente a personas o entidades sin ánimo de lucro, algo que ya han hecho con otros inventos. Así, los beneficiarios serían grupos ecologistas que realizan trabajos de repoblación u organizaciones que trabajan en países en vías de desarrollo, por ejemplo.

 

 

 

Congreso mundial sobre restauración de bosques

El protector de semillas ha sido presentado al público experto reunido en el ‘Congreso IUFRO sobre Restauración Forestal: Avances en Teoría y Técnicas’, celebrado a finales del mes de septiembre en Madrid. José Reque y Eduardo Martín han expuesto una comunicación en este evento, promovido por la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (siglas en inglés de IUFRO), asociada a la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).


Esta asociación internacional tiene entre sus objetivos promover la cooperación mundial en la investigación relacionada con temas forestales, mejorar la comprensión de los aspectos ecológicos, económicos y sociales de los bosques y árboles o difundir conocimientos científicos entre las partes interesadas y las entidades que toman decisiones. En el marco del congreso celebrado en Madrid se han mostrado los últimos avances técnicos en cuanto a reforestación alcanzados en el área Mediterránea y que podrían ser aplicados en otras zonas que requieren una restauración forestal.