Tecnología España , Valladolid, Martes, 01 de septiembre de 2009 a las 13:01

Un proyecto internacional pretende conocer nuevos detalles sobre los campos magnéticos del sol

Científicos europeos y americanos han desarrollado el instrumento ‘Sunrise’, que consta de un retardador óptico de cristal líquido de procedencia vallisoletana para medir la polarización de la luz

Cristina G. Pedraz/DICYT La física solar es capaz de distinguir detalles de entre 35 y 100 kilómetros en la superficie del astro rey, una resolución indispensable para percibir diferencias de temperatura o variaciones en el campo magnético entre puntos próximos. Esta información es necesaria para comprender algunos de los fenómenos que tienen lugar en la atmósfera solar, como las tormentas electromagnéticas, causantes de trastornos en los sistemas de comunicaciones terrestres y cuya influencia en el clima también se está estudiando actualmente. Así se pone de manifiesto la importancia del proyecto Sunrise, a través del cual científicos europeos y americanos han desarrollado un instrumento para el estudio de los campos magnéticos del sol.

 

El Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) lidera la amplia participación española en el proyecto, del cual forman parte Manuel López y Javier Rodríguez, responsables de la empresa del Parque Tecnológico de Boecillo (Valladolid) Visual Display.El Sunrise consta de tres dispositivos para la observación solar: un telescopio de un metro de diámetro, un espectógrafo (instrumento óptico que deja registrado en una placa fotográfica el espectro de una señal luminosa) y un magnetógrafo denominado IMAX (acrónimo de Imagin Magnetograph eXperiment), el instrumento más complejo del proyecto y que ha sido dirigido por el IAC.

 

El magnetógrafo es capaz de tomar imágenes bidimensionales del campo magnético del sol a partir de la medida de la polarización de la luz solar. Para realizar esta medición, IMAX utiliza la tecnología de retardadores ópticos basados en cristal líquido (ROCLIs) que ha sido suministrada por Visual Display, explica Manuel López. Polarización de la luz.

 

Tal y como ha precisado, se trata de un dispositivo cuya estructura “es parecida a la de un display”, es decir, un LCD (acrónimo del inglés Liquid Crystal Display), aunque su función “no es mostrar información, sino que varía una de las propiedades de la luz solar y la caracteriza”, la polarización, un parámetro físico relacionado con la orientación del campo eléctrico de las ondas muy útil para analizar manchas solares, poros y regiones activas del sol. Mediante el ROCLI desarrollado por la firma vallisoletana se podrán estudiar estos aspectos con unas resoluciones espaciales y temporales jamás alcanzadas desde la Tierra.

 

Seis días por encima del Círculo Polar Ártico
Para realizar estas precisas mediciones, el Sunrise ha realizado un vuelo de seis días en la barquilla de un globo estratosférico. El pasado 8 de junio fue lanzado con éxito desde el Centro Espacial de Esrange, situado cerca de la ciudad de Kiruna (Suecia), aprovechando que en esta época del año en las latitudes por encima del círculo polar ártico el sol es visible las 24 horas del día (fenómeno del sol de medianoche).El globo relleno de helio invirtió tres horas para ascender 40 kilómetros por encima de la superficie terrestre. De este modo, evitó las turbulencias de la atmósfera terrestre que suelen limitar las capacidades de los telescopios en tierra, así como el vapor de agua y el ozono presentes en ella que absorben parte de la radiación en el espectro electromagnético ultravioleta e infrarrojo que también quieren ser estudiadas. La misión pretende distinguir detalles en la superficie solar de menos de 35 kilómetros.