Alimentación España Salamanca, Salamanca, Martes, 02 de octubre de 2007 a las 14:26

Una cooperativa de Carbajosa es pionera en Salamanca en la recogida de aceite de cocina usado para reciclar como biodiésel

La empresa, reconocida esta semana como gestor de residuos por la Junta, quiere llevar su actividad a los domicilios particulares

JPA/DICYT Una cooperativa ubicada en Carbajosa de la Sagrada es la pionera en la provincia de Salamanca en la recogida de aceite de cocina usado para reciclarlo como combustible biodiésel. Después de sus primeros meses de actividad, Porsiete ha obtenido esta semana el reconocimiento como gestor de residuos por parte de la Junta de Castilla y León. Hasta el momento, la empresa se ha centrado en la recogida de aceite vegetal de establecimientos hosteleros, actividad que en un futuro cercano espera ampliar los domicilios particulares.

 

Porsiete basa su actividad en la recogida gratuita del aceite, su tratamiento mediante limpieza y decantación y, finalmente, el almacenaje hasta que la empresa catalana Compalsa se lo lleva para transformarlo en biodiésel. "El proceso más importante que nosotros realizamos es el de limpieza, que consiste en eliminar las impurezas y el agua", ha declarado a DICYT Pilar Rodríguez, socia de la cooperativa. Para ello, utilizan un sistema basado en la aplicación de calor y filtraciones de unos depósitos a otros hasta que el aceite queda listo para ser transformado en biocombustible.

 

Ampliación novedosa

 

El carácter social de la cooperativa, que en la actualidad cuenta con cuatro socios y dos trabajadores hace que se centre "en la rentabilidad, pero no sólo económica, sino en la rentabilidad para las personas y para el medio ambiente", señala Pilar Rodríguez. En ese sentido, la iniciativa tiene una clara vocación de expansión. Si en la actualidad se recoge aceite vegetal de establecimientos hosteleros, sobre todo de Salamanca capital y algunos pueblos de su alfoz, el próximo paso que quieren dar los cooperativistas es la recogida en los domicilios, para lo cual ya están en conversaciones con algunos municipios.

 

Esta iniciativa sería muy novedosa ya que hasta el momento sólo se conocen iniciativas puntuales en algunas comunidades de vecinos, a pesar del gran poder contaminante de los aceites vegetales. "Un litro de aceite puede contaminar mil litros de agua", asegura Pilar Rodríguez, "además de que a la larga daña las depuradoras y las tuberías", apunta.

 

En la actualidad, es obligatorio que los establecimientos hosteleros acrediten el destino del aceite vegetal usado, un servicio que en Salamanca sólo prestaba una empresa de Valladolid hasta la puesta en marcha de Porsiete el pasado mes de mayo. Sus promotores se pusieron en contacto con varias iniciativas similares en aquel momento y hoy en día ya piensan en incluir tecnología más avanzada para el tratamiento del aceite recogido.