Una empresa vallisoletana desarrolla una célula para la aplicación de siliconas mediante robot
Cristina G. Pedraz/DICYT La empresa vallisoletana Inimax, ubicada en el polígono industrial de El Carrascal, ha desarrollado una célula para la aplicación de siliconas u adhesivos mediante robot, una aplicación novedosa que permite el trabajo con distintos tipos de piezas simultáneamente. El desarrollo se ha instalado en la empresa de iluminación Indal y consiste en una mesa de indexado en la que pueden colocarse hasta tres tipos de piezas iguales o diferentes. El operario elige el tipo de pieza que se ha colocado y, a través de una pantalla táctil, selecciona el modo de trabajo de forma que se evitan errores.
Según han explicado a DiCYT Raúl Zapico y Daniel Díez, directores técnico y comercial respectivamente, el objetivo de la instalación fue “aumentar la producción y crear una línea mucho más flexible que pudiera trabajar a la vez con distintas piezas”. Hasta el momento, el operario cargaba la mesa con una luminaria para que la máquina la sellara, pero esto solo se podía hacer con una única pieza. Con el nuevo sistema la mesa se ha dividido en dos zonas y, mientras en una el operario va cargando piezas, en la otra el robot trabaja.
Asimismo, cada una de estas zonas se ha fraccionado en tres partes donde se puede trabajar con tres piezas distintas o iguales, “de manera que se incrementa la producción y se llega a una flexibilidad importante para la línea de producción”. Del mismo modo, la flexibilidad se encuentra en la introducción del robot, ya que “si en un corto espacio de tiempo el proceso cambia o se elimina esta línea de trabajo se puede cambiar la base de apoyo y el útil que maneja y emplear el robot en otra tarea, de manera que la inversión se puede rentabilizar mucho más”.
Otro de los elementos diferenciales del sistema desarrollado radica en la dotación de una serie de aplicaciones y software sencillos para su uso por parte de los operarios que nunca han trabajado con robots. “Intentamos romper la barrera de las empresas que tienen miedo de instalar estas herramientas porque tecnológicamente están por encima de las posibilidades del personal de mantenimiento”, apuntan los técnicos. Así, el objetivo es que el cliente “pueda ser autosuficiente en este tipo de instalaciones y que no tengan que contar con un robótico para manejarlo”.
Lo normal en este tipo de instalaciones, tal y como señalan, es que un técnico especializado en robótica programe la trayectoria del robot. No obstante, en este caso se ha parametrizado la instalación “para que el propio personal de producción sea capaz de desarrollar un programa nuevo y de definir los modos de trabajo”, lo que conlleva “una parte de formación a los operarios de producción importante, así como una formación específica para el personal de mantenimiento”. Como subrayan, esta filosofía la han formulado en otros proyectos y en estos momentos “operarios que nunca habían trabajado con un robot están haciéndose sus propios programas de trabajo”.
Cinco años de trabajado en I+D+i
Inimax inició hace cinco años su trabajo de I+D+i. Este año es en el que más proyectos están trabajando, tanto propios como en colaboración con centros como Cartif. “Entendemos que es una alternativa buena para aprender a hacer nuevas cosas, conseguir un producto que pueda ser interesante para el entorno en que nos movemos y también como alternativa de crecimiento, no podemos estar siempre haciendo lo mismo”, apuntan.
La empresa se dedica a la automatización industrial en general, aunque en los últimos tiempos se ha centrado más en el sector de la alimentación y el agroindustrial, con gran peso en la comunidad. En este sentido, tras trabajar con diversas tecnologías como la visión artificial, la lectura de códigos de barras o la RFID (siglas en inglés de indentificación por radiofrecuencia), decidieron dar el salto a la robótica. “La manera de hacerlo fue a través de un proyecto de I+D, que para nosotros no surge de dentro de la empresa sino de las necesidades de nuestros clientes, de cómo va el mercado o de aspectos que aún no están resueltos”, concluyen.