Una red de investigadores vallisoletanos liderará un proyecto sobre nanomateriales a nivel europeo
BGA/DICYT La red de investigación europea Biopolysurf, liderada por el profesor de la Universidad de Valladolid José Carlos Rodríguez Cabello y dedicada a la investigación y formación de investigadores, será financiada por la Comisión Europea durante los próximos cuatro años al haber obtenido la máxima puntuación en el área de Química de la última convocatoria de la Marie Curie Research Training Networks, que supone una inyección económica de 3’5 millones de euros.
La red está formada por 12 de los más prestigiosos centros europeos dedicados al desarrollo de nuevos materiales y sus aplicaciones, y tiene entre sus principales objetivos el desarrollo de nuevos sistemas poliméricos con aplicación en el sector biomédico, analítico, tecnológico y biotecnológico, desde la óptica de las nuevas disciplinas emergentes de la Nanotecnología y la Nanobiotecnología.
El trabajo que están desarrollando afecta al desarrollo de nuevos substratos que pueden cumplir diversas funciones desde el punto de vista biológico y que, además, son biocompatibles, lo que permite su empleo en la ingeniería de tejidos y la multiplicación y desarrollo de células madre.
Está previsto que la red desarrolle nano y micro contenedores autoensamblados e inteligentes para la dosificación controlada de fármacos, proteínas bioactivas y genes incluso a nivel intracelular. Asímismo, se realizarán dispositivos con características nanométricas para su empleo en genómica y proteinómica, así como en otros dispositivos analíticos miniaturizados. Finalmente, se espera poder desarrollar motores, dispositivos de bombeo y válvulas altamente miniaturizadas a modo de dispositivos moleculares. El grupo del profesor Rodríguez Cabello, conocido como Bioforge, está especializado en el desarrollo y obtención de polímeros a partir de microorganismos. Tales materiales se están desarrollando como alternativas para la producción de plásticos y cauchos obtenidos a partir del petróleo. Los materiales obtenidos a partir de microorganismos no utilizan derivados del petróleo como materia prima y son altamente biodegradables y medioambientalmente limpios.
Además de la Universidad de Valladolid, la red está integrada por centros de Turquía, Grecia, Suiza, Holanda, Alemania, Finlandia, Francia y la Universidad Politécnica de Cataluña, y entre sus funciones también figura la de promover el intercambio de investigadores de los distintos grupos.