Una versión del concurso 'Un, dos, tres', eficaz como terapia para el alzhéimer

JPA/DICYT Un estudio científico ha demostrado la eficacia de un juego basado en el popular concurso televisivo 'Un dos, tres' como terapia para enfermos de alzhéimer. 'Un, dos, tres... a recordar esta vez' es el nombre de este programa creado por la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFA) de Zamora con el apoyo del Centro de Referencia Estatal (CRE) de Atención a Personas con Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias ubicado en Salamanca, que ha sido presentado hoy en la capital salmantina.

La estimulación cognitiva que propicia esta actividad tiene su reflejo en la mejora de la atención, la capacidad de cálculo, la lectura, la concentración, la conducta o el estado anímico, según han explicado los responsables de la iniciativa. Preguntas como "pueblos de la provincia de Salamanca", seguidas del lema "un, dos, tres, a recordar esta vez", ayudan a fomentar la plasticidad neuronal de los enfermos. Es decir, que a pesar de la pérdida de neuronas que implican este tipo de enfermedades, el esfuerzo mental que implican estas actividades hace que se establezcan nuevas conexiones neuronales, de manera que se enlentecen los efectos de la patología.

"La dinámica del juego permite trabajar con diferentes parejas que, a la vez que cooperan entre ellas, compiten con las demás", ha explicado Manuel Figueruelo, presidente de la AFA de Zamora. Las personas que participan se sitúan en un "ambiente de estimulación atractivo porque forma parte del acervo cultural de este país y promueve mucho la participación de todas las personas presentes, que interactúan unos con otros", añade, refiriéndose a que en la actividad se realiza una gran simulación en la que participan varias personas, entre enfermos y terapeutas con el objetivo de recrear el conocido concurso a lo largo de una hora y media.

La AFA de Zamora comenzó a adaptar el concurso hace varios años con el apoyo del creador del concurso televisivo original, Chicho Ibáñez Serrador. Aunque el realizador de televisión no ha podido estar presente en la presentación de hoy, ha mandado una carta de apoyo en la que dice sentirse halagado de que su programa de televisión más famosa tenga esta inesperada utilidad. "No he pretendido otra cosa que entretener al público o como mucho dejar una puerta abierta a la reflexión", asegura en la misiva, así que "no podía imaginar que tantos años después mi programa más querido iba a saltar la barrera de la simple diversión para tener una utilidad real y tan importante como ayudar a personas que sufren una merma en su calidad de vida".

El CRE Alzheimer de Salamanca invirtió 18.000 euros en esta iniciativa en concepto de material y de formación de personal especializado dentro de su estrategia de investigación en terapias no farmacológicas que tengan una base científica. En este caso, la evidencia científica se estableció formando un grupo experimental de enfermos que participó en la actividad y comparándolo con otro grupo control que no participó. Así se demostró que los resultados fueron significativos.

Ahora, una vez realizado el estudio, la experiencia queda a disposición de otras asociaciones y centros que quieran desarrollar esta misma actividad buscando resultados positivos en el tratamiento no farmacológico que siguen sus pacientes.