Valladolid, sede de 29 ensayos de ruido de neumáticos de fabricantes de todo el mundo
CGP/DICYT Con el frío invernal, los laboratorios que la firma Audi tiene en Alemania para testar neumáticos quedan fuera de servicio. Para el fabricante era necesario contar con otras instalaciones homologadas según la normativa europea que pudieran prestar servicio en invierno, y el lugar elegido ha sido Valladolid. A través del centro tecnológico Cidaut, en los meses de noviembre y diciembre del pasado año se ha acreditado el Centro Municipal de Acústica, perteneciente al Ayuntamiento de Valladolid, para realizar ese tipo de pruebas.
El Centro Municipal de Acústica se ha convertido así “en el único laboratorio europeo para realizar, en el periodo invernal, las mediciones de ruido producido por las diferentes marcas y tipos de neumáticos instalados en los vehículos de la firma Audi”, según ha destacado Javier León de la Riva, alcalde de la ciudad. El regidor ha suscrito hoy un protocolo de colaboración con el director de la Fundación Cidaut, Juan Carlos Merino, con el fin último de situar a Valladolid como punto de referencia europeo en la realización de estos test de ruido. Asimismo, el convenio “servirá de paraguas para empezar a colaborar en otros campos en los que trabaja Cidaut como la biomasa o los asfaltos fonoabsorbentes”.
Hasta la fecha, ha subrayado el alcalde en declaraciones recogidas por DiCYT, se han realizado 29 ensayos diferentes con marcas de neumáticos como Continental, Pirelli, Goodyear y Michelín, y se prevé llevar a cabo otros nuevo próximamente con firmas como Bridgestone, cuyos técnicos tienen previsto un desplazamiento desde Roma para efectuar mediciones con sus equipos y comparar los resultados con los de su pista.
Características de la prueba
Asimismo, De la Riva ha explicado en qué consisten estos ensayos. “Se lanza el vehículo a 50 kilómetros por hora y cuando llega a esa velocidad se apaga el motor del coche para que el único ruido que quede sea el que hace el neumático cuando roza el asfalto”. Para ello, es necesario que la pista presente unas características especiales como una textura superior a 0,4 milímetros, una absorción sonora mínima y un contenido de huecos menos al 8 por ciento”.
Por su parte, el director de la Fundación Cidaut ha señalado que, al igual que en cualquier otro proyecto de I+D+i, la puesta en marcha de este laboratorio “ha requerido un esfuerzo y trabajo de alto nivel”. Técnicos de Audi, del Centro Municipal de Acústica y de Cidaut realizaron en los meses de noviembre y diciembre una batería de ensayos para estimar el nivel de correlación de la pista con las que la marca alemana tiene en sus instalaciones.
En cuando a los primeros ensayos, Moreno ha resaltado “la buena acogida” de los fabricantes sobre las instalaciones y la metodología puesta a punto, incluso por parte de aquellos “que no pasaron el examen”. Finalmente, el director de la Fundación Cidaut ha recordado que el centro tecnológico cuenta con cerca de 300 tecnólogos en sus instalaciones del Parque Tecnológico de Boecillo (Valladolid), así como con 11 spin-off surgidas en su entorno que aglutinan a otros cerca de 300 trabajadores cualificados. Además, Cidaut tiene abierta una sede permanente en Alemania en la que se encuentran cerca de una docena de técnicos.
Un nuevo reglamento para paliar el ruido | |
Según un nuevo reglamento de la Unión Europea, los neumáticos fabricados después de junio de 2012 y comercializados en la Unión a partir de noviembre de este año tendrán que llevar un adhesivo similar al que ya se adjunta a electrodomésticos como lavadoras o lavavajillas. Se trata así, de que este mercado contribuya a paliar un problema medioambiental importante como es el ruido, que viene determinado por la intensidad del tráfico y las clases de vehículos; el estilo de conducción o la interacción entre neumático y carretera.
Este nuevo reglamento pretende aumentar la seguridad y la eficiencia económica y medioambiental de los transportes por carretera promoviendo neumáticos seguros que permiten el ahorro de combustible con bajos niveles de ruido. Los beneficios previstos por el uso de este tipo de neumáticos son una reducción de emisiones de CO2 de hasta cuatro millones de toneladas al año, un mejor rendimiento en cuanto al agarre en mojado y una reducción de las emisiones sonoras. |