A la vanguardia de la investigación en adhesión dental

José Pichel Andrés/DICYT La Cínica Odontológica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Salamanca comienza a despuntar en el campo de la investigación, en particular, en el ámbito de la adhesión en diferentes especialidades, como la ortodoncia, la conservación y la restauración dentales. En el presente curso académico se van a presentar cinco tesis doctorales relacionadas con esta línea de investigación tras la publicación de artículos en las mejores revistas científicas.

Tres de las tesis se centran en la adhesión en ortodoncia, la rama que se encarga de corregir la forma y posición de la dentadura por medio de elementos como los brackets. Habitualmente, el proceso se divide en tres partes. Primero se aplica un ácido sobre la superficie del esmalte para crear microporosidades; sobre ellas se aplica un adhesivo; y finalmente se emplea cemento de resina, sobre el que va colocado el bracket.

Aunque el sistema es bueno, “se pueden hacer cosas nuevas”, asegura en declaraciones a DiCYT Alberto Albaladejo, investigador de la Clínica Odontológica y director de las tesis, que ha identificado tres posibles mejoras: acortar los pasos, mejorar la eficacia adhesiva y evitar daños en los dientes.

Para el primer paso, se emplea ácido ortofosfórico, un acondicionador que crea poros sobre los que se asienta el adhesivo posterior. Sin embargo, provoca desmineralización y descalcificación en la superficie del esmalte y a largo plazo puede influir en la aparición de caries. Por eso, los científicos han apostado por una nueva idea: utilizar el láser de femtosegundo, que crea diminutos agujeros que pueden cumplir la misma función dañando menos el esmalte. “Es eficaz porque puede hacer microporos muy separados”, comenta el experto.

Cementos

Una de las opciones más interesantes para la mejora de la adhesión en ortodoncia sería suprimir el segundo paso, es decir, eliminar el adhesivo. “Si tenemos un cemento lo suficientemente fluido para que penetre sobre irregularidades que hemos creado sobre el esmalte, sería un gran ahorro tanto de tiempo como económico, puesto que es el paso más caro”, señala el experto. Por eso, uno de los trabajos ha consistido en probar diferentes cementos utilizados en otras especialidades odontológicas.

De esta manera, la Clínica Odontológica de la Universidad de Salamanca ha conseguido dos mejoras, acortar los pasos y evitar posibles daños en los dientes. Aunque no se ha logrado una mayor eficacia adhesiva con respecto a lo que había, sí se ha conseguido igualar, así que la investigación en ortodoncia ha dado buenos frutos. En esta línea, a los trabajos anteriores hay que añadir un estudio sobre la adhesión a las muelas, en la que no se emplean brackets, sino tubos. El problema de estos elementos es que tienen un mayor riesgo de caerse debido a que las muelas ejercen mucha más fuerza al masticar, así que Alberto Albaladejo y su equipo comparan la adhesión de los tubos con la de los brackets e analizan qué cementos le pueden dar más consistencia.

Odontología conservadora y restauradora

Fuera del campo de la ortodoncia, la investigación sobre adhesión también afronta retos en odontología conservadora y restauradora. Una de las ideas es aplicar también el láser para probar la adhesión a la dentina, la parte interior del diente. Por el momento, los resultados no son tan bueno como en el esmalte, pero los estudios prosiguen en colaboración con el físico Pablo Moreno.

Por otra parte, para la restauración de piezas dentales se está utilizando mucho el circonio, cuyo principal punto débil es la adhesión, así que los investigadores de la Universidad de Salamanca también están utilizando el láser (en este caso uno distinto, el Erbium) para crear microporosidades y diferentes combinaciones de acondicionadores que ayuden a la fijación de las piezas.

En conjunto, las tesis doctorales que a lo largo de este curso han presentado o van a presentar Ana Luisa Caseiro, María Lobato Carreño, María Cruz Lorenzo Luengo, María Portillo y Luis Daniel Pellicer son el reflejo de una intensa actividad investigadora y de calidad en este campo, puesto que cada una de ellas está basada en tres artículos publicados en revistas de alto factor de impacto. En pocos meses pasarán por Salamanca algunos de los mejores investigadores de las universidades españolas, ya que forman parte de los tribunales de tesis de estos jóvenes investigadores.