Alimentación España León, León, Lunes, 19 de mayo de 2008 a las 17:50

"Castilla y León tiene mucho potencial para producir energía eólica, pero está condicionado al desarrollo de la red eléctrica"

Santiago Sabugal García, presidente de la Plataforma Tecnológica Española del CO2

IGC/DICYT En la pasada legislatura, un grupo de expertos puso en marcha un estudio sobre prospectivas energéticas en el horizonte 2030. Para Santiago Sabugal, presidente de la Plataforma Tecnológica Española del CO2 (AECO2) y subdirector de Ingeniería e I+D de Endesa Generación, ese futuro se resume en una mezcla (mix) de varias fuentes energéticas: renovables, nucleares y fósiles, principalmente carbón. Sabugal, quien ofreció recientemente una conferencia en León sobre este tema, cree que el proyecto de captura y almacenamiento de CO2 de Ponferrada traerá importantes desarrollos tecnológicos en los que deben partipar las empresas españolas. Como vector energético de futuro el experto señala el hidrógeno.

 

Según declaró Sabugal a DICYT, los factores fundamentales que condicionarán el papel de las energías renovables en el horizonte de 2030 serán "el desarrollo tecnológico y los costes de inversión y producción". El Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), del Ministerio de Industria, estima que las renovables pueden suponer en torno al 23 por ciento de la energía primaria producida en esa fecha. Sin embargo, para Sabugal, "teniendo en cuenta el potencial de desarrollo que tienen las energías fotovoltaica y eólica, las renovables podrían aportar hasta un 50 por ciento de la energía eléctrica" del país. 

 

"Castilla y León tiene más potencial para desarrollar energía eólica del que hay en la actualidad", aseguró el presidente de la AECO2, "pero está condicionado al desarrollo de la red eléctrica". Para el experto, también tiene un gran potencial de desarrollo en biomasa y en energía solar y fotovoltaica. "Hay superficie sufiente, por lo que la ocupación del terreno no condicionaría usos agrícolas", zanjó Sabugal. El científico cree que "hay que ir hacia un mix de energías".

 

El cierre de Garoña

 

"Hay que utilizar energías fósiles, principalmente carbón, puesto que su mercado es más previsible y seguro que el gas o el petróleo. Hay que tener un porcentaje de energías renovables, lo que permita su desarrollo tecnológico. Y hay que utilizar también la energía nuclear", dijo Sabugal, para quien "las centrales nucleares españolas funcionan perfectamente", y se debería construir alguna más. En su opinión, la postura del Gobierno sobre este tema (incialmente, mantener las seis centrales nucleares existentes hasta el fin de su vida útil) se aclarará si cierra o no Garoña (Burgos, cuyo cierre está previsto para 2009).

 

Asimismo, dado que "los combustibles fósiles van a seguir jugando un papel muy importante en todo este siglo", Sabugal cree que "las tecnologías de captura y almacenamiento de CO2 como las del proyecto Ciuden en Ponferrada servirán de base para desarrollar las tecnologías tanto de oxicombustión como de postcombustión aplicadas a la producción de energía eléctrica y a otro tipo de industrias que emiten CO2". "Estas plantas son pioneras a nivel muncial", aseguró el experto, "y pueden ser la base de un desarrollo tecnológico importante. Lo que necesitamos es que empresas españolas participen y creen tecnología, que no sean sólo compradores de licencias", puntualizó.
 

 

Investigación para utilizar el hidrógeno como energía limpia
En cuanto a las perspectivas de futuro en el sector de la energía, Santiago Sabugal destaca la investigaicón que se está realizando en torno al hidrógeno, "un vector energético muy poco desarrollado, pero sobre el que hay proyectos muy interesantes". El presidente de la Plataforma Tecnológica Española del CO2 destacó dos, uno de la Plataforma Solar de Almería y otro del CSIC, que "en poco tiempo puede dar resultados". Según el experto, estas investigaciones se basan en concentrar energía del Sol mediante un foco para descomponer el agua y obtener de ella hidrógeno, que "podría sustituir a la gasolina en motores de combustible". Además, es una energía que "no contamina, sólo produce vapor de agua".