Cuatro de cada cinco usuarios de comercio electrónico comprueban si el protocolo es seguro

Antonio Martín/DICYT La seguridad a la hora de adquirir algún producto o servicio por internet está calando entre los internautas y las empresas se deben adaptar a estas exigencias. Éste podría ser el resumen de un seminario que el Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (Inteco), ha ofrecido fundamentalmente para empresas que operan en el ámbito del comercio electrónico con motivo de la celebración hoy del Día Internacional de la Internet Segura. Encuestas realizadas por el instituto, con sede en León, hablan de la madurez del mercado español y de las exigencias de los usuarios. Roberto Martínez, responsable del encuentro, resalta que el 75% de los clientes de comercio electrónico tienen un grado de satisfacción bueno o muy bueno cuando han realizado estas operaciones y que el 80%, cuatro de cada cinco, comprueba primero que el protocolo utilizado en la web sea seguro.

Un centenar de asistentes, en su mayoría procedentes de sectores comerciales, se acercaron a la sede del Inteco para conocer aspectos técnicos que rigen el comercio por medios telemáticos, que presenta algunas diferencias substanciales con el tradicional de mostrador y trato cara a cara. Roberto Martínez, ingeniero de seguridad del Inteco-CERT, el equipo de respuesta ante emergencias informáticas del que está dotado el instituto nacional, explica a DiCYT que el comercio electrónico se fundamenta, desde el punto de vista empresarial, en dos bases: "Por un lado, existe una responsabilidad legal que cumplir, ya que fundamentalmente supone el préstamo de un servicio a cambio de dinero, y por otro, hay una legislación específica a las que los servicios web deben atender, basada tanto en la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD) como en la Ley de Comercio Electrónico".

Aunque el desarrollo del comercio electrónico es amplio en España, "la legislación es reciente y se basa en adaptar las experiencias de otros países, por lo que se puede considerar que el país está entre los punteros en esta materia", aún existen dudas por parte de los empresarios. Estas dudas se centran, según lo observado en este seminario, "a nivel legal", esto es, en conocer "qué necesidades se deben cubrir" para cumplir con las leyes que regulan esta actividad comercial, explica Roberto Martínez.

Medidas de seguridad altas

La estructura comercial electrónica española presenta, para Martínez, un grado de seguridad a la hora de tomar medidas por parte de los proveedores de servicios y bienes "bastante alto". Fueron, según recuerda, los bancos los pioneros en establecer las primeras medidas a este respecto, y asegurar las actividades económicas de sus clientes, "y muchas empresas se apoyaron en esta experiencia para desarrollar sus propias medidas de seguridad". Dos ejemplos de este tipo de acciones que garantizan que el consumidor tiene protegida su acción de compra en internet son los protocolos seguros y los certificados. En ambos casos, hay dos métodos sencillos para comprobar si el protocolo utilizado es seguro y si el certificado empleado en la operación es válido, recuerda Roberto Martínez.

El protocolo de transferencia de hipertexto habitual es el http que aparece al comienzo de una dirección en internet. En el caso de que se añada una ese (https), el sistema indica que este protocolo es seguro. En el caso de la validez de la certificación, también hay una manera rápida de conocer este parámetro en el navegador de internet. Si la barra de dirección se vuelve azul, la web garantiza la validez. Si se torna verde, no solo la garantiza, sino que además añade que esta certificación es propia, propiedad de la web que visitamos. Esto ocurre, por ejemplo, al operar con PayPal, una conocida empresa estadounidense con la que se realizan muchas operaciones de pago de comercio electrónico.

Martínez destaca que, tras los bancos, actualmente los sectores más pujantes en España en materia de implementar medidas de seguridad en internet son los de viajes ("por la actual demanda en este tipo de servicios"), las empresas tecnológicas que ofrecen desde equipos informáticos hasta consumibles, y los sistemas de pago en línea, como el propio PayPal o las delegaciones de Amazon o Google.

Riesgos para las empresas

En el contexto actual de desarrollo del comercio electrónico y la exigencia de la mayor parte de los usuarios, lo peor para una empresa, según explica el especialista del Inteco, es precisamente no contar con estos sistemas de seguridad en la web. Puede suponer dos acciones lesivas para los intereses de las empresas, "la falsificación de los sitios web, esto es, la suplantación de la identidad de la tienda" y "una imagen corporativa deficiente", lo que es contraproducente para los esfuerzos de una empresa que se dedica a la venta en línea.

Con el objeto de acerar estos sistemas de seguridad a la ciudadanía y el empresariado, el Inteco comenzará "en el plazo aproximado de un mes" un novedoso curso en línea sobre comerico electrónico. En un primer término, el ciclo estará orientado a usuarios para luego expanderse a las empresas, "los dos lados de este espejo".