El Centro del Cáncer analiza marcadores moleculares que determinan la eficacia de fármacos contra el tumor de mama

JPA/DICYT Joaquín Arribas, científico del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona, ha impartido hoy jueves una conferencia en el Centro de Investigación del Cáncer (CIC) de Salamanca bajo el título Activación oncogénica del receptor de EGF mediante inicio alternativo de la traducción. Relevancia en el desarrollo y tratamiento del cáncer de mama. Un trabajo que según ha explicado el investigador se centra en la búsqueda de marcadores moleculares que determinen la eficacia de los nuevos fármacos contra el cáncer de mama, es decir, en el hallazgo de datos que revelen en qué pacientes resultan beneficiosos estos tratamientos y por qué.

Arribas ha explicado hoy en declaraciones a DICYT que la búsqueda de nuevos fármacos en la lucha contra este tipo de tumores ha requerido años de investigación y ensayos clínicos y que, sin embargo, "no son efectivos del todo, ya que sólo el 30% de los pacientes se benefician de sus efectos", mientras que el 70% restante no puede decir lo mismo. Por eso, los estudios se centran en descubrir por qué no logran una mayor eficacia y así poder predecir para qué casos sí están indicados. En la actualidad, un médico no puede discernir a priori si estos nuevos fármacos tendrán el efecto deseado en un determinado paciente, de manera que "hay que buscar los marcadores moleculares que lo indiquen y así, mediante una prueba que podría consistir en un simple análisis de sangre, saber si el enfermo pertenece al grupo del 30 o del 70%", explica.

La clave está en los receptores de factores de crecimiento celular, es decir, una serie de sustancias, en su mayoría proteínas, cuya función consiste en estimular la proliferación celular, mantener la supervivencia celular, estimular la migración hacia determinados tejidos, promover la diferenciación o dar la orden de apoptosis (muerte celular programada). En el caso del cáncer de mama el receptor EGF (siglas en ingles que se refieren al Factor de Crecimiento Epidérmico) es el que con más frecuencia presenta alteraciones. "Los receptores de EGF están hiperactivados y le dicen a la célula que siga creciendo", comenta Arribas. Es ahí donde los nuevos fármacos actúan, dirigidos a inhibir el mecanismo de transmisión de señales de las células cancerígenas, con el objetivo de detener el crecimiento del tumor. Aunque los resultados positivos se limitan al 30% que comentamos anteriormente".

Por todo ello, la investigación del equipo del Vall d´Hebrón se puede enmarcar dentro de la búsqueda de las llamadas dianas terapéuticas, que representan aquellos componentes de la célula sobre los que incide, de manera eficaz un tratamiento. El objetivo último es tratar únicamente las células cancerígenas sin atacar indiscriminadamente al resto de tejidos.

Aplicación al paciente

En este sentido, Joaquín Arribas destaca la importancia de que en un mismo centro se desarrolle este tipo de trabajos más vinculados a la investigación básica y la clínica. "Existe la percepción de que la investigación básica no se traslada al paciente, porque no es fácil ese trasvase de información, pero nosotros siempre tenemos la cabeza puesta en este objetivo", apunta, ya que el Hospital Valle d´Hebrón de Barcelona trabaja al mismo tiempo en los estudios básicos y aplicados, como ocurre ya en muchos otros centros españoles, entre ellos el de Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca.

Joaquín Arribas López es coordinador del Programa de Investigación en Oncología Médica, del Institut Català de la Salut. El máximo responsable del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitari Vall d´Hebrón es José Baselga, que se encarga también del subprograma de investigación clínica, mientras que Arribas encabeza el grupo de investigación básica y traslacional.