Tecnología España , Valladolid, Miércoles, 27 de julio de 2005 a las 19:25

El Plan de Residuos Industriales 2005-2010 prevé destinar más de tres millones de euros a I+D+i

Se trata de fomentar líneas de investigación dedicadas a mejorar la valorización de los residuos y a buscar el modo de reducir el impacto de los residuos peligrosos

BGA/DICYT El Plan de Residuos Industriales 2005-2010 proyecta destinar más de tres millones de euros al apartado de investigación, desarrollo e innovación, según explicó hoy el consejero de Medio Ambiente, Carlos Fernández Carriedo, durante la presentación del proyecto del plan, que aún debe pasar algunos trámites antes de su aprobación.

En concreto, se destinarán 2'17 millones de euros a la investigación en materia de residuos peligrosos, mientras que algo más de 930.000 euros se dedicarán a la investigación de los no peligrosos. En este sentido, el director general de Calidad Ambiental, José Antonio Ruiz, señaló a DICYT que se trata de una partida económica cuyo objetivo es fomentar las líneas de trabajo encaminadas a “valorizar los residuos” y conseguir recuperar la mayor parte posible de los restos para nuevos usos.

También se contemplan líneas de investigación dedicadas a minimizar el impacto de los residuos peligrosos y, según señaló, se espera que se puedan abrir nuevas líneas de estudio como las que ya tienen en marcha centros de investigación como Cidaut y Cartif.

El Plan de Residuos Industriales contempla un gasto total de 137 millones de euros, de los cuales hay un 88% financiado por empresas privadas y un 12% aportado por la Junta. Según Carriedo, se trata de conseguir que la comunidad autónoma cuente con todas las infraestructuras necesarias en materia de residuos industriales como para hacer frente al desarrollo que puede tener la industria en los próximos años.

Los residuos industriales son aquellos que son producidos por grandes industrias y que, en algunos casos pueden ser peligrosos, como es el caso de los aceites hidráulicos minerales, lodos de mecanizado, ácidos de decapado, residuos con metales pesados o filtros que contienen sustancias peligrosas. Otros residuos, considerados no peligrosos pero que deben ser tratados son los producidos por la agricultura, procesos térmicos o residuos industriales asimilables a urbanos.

No se consideran, sin embargo, residuos industriales aquellos como los mineros, los procedentes de industrias cárnicas, residuos de construcción, neumáticos o aparatos eléctricos, por ejemplo.

Producción estimada

Según los datos aportados por la Junta, en Castilla y León se producen anualmente una media de 157.000 toneladas de residuos peligrosos, de los cuáles un 37% es recuperado para otros usos, mientras que el 63% es destinado a eliminación. El nuevo plan presenta un proyecto que pretende reducir un 15% la producción e incrementar la valorización hasta el 60% del residuo.

En el caso de los residuos no peligrosos, los datos de 2003 marcan una media de 3.600 toneladas producidas al año, de las cuáles un 35% de recupera y un 65% es eliminado. La previsión plantea reducir la producción de este tipo de residuos en un 4% e incrementar la valorización hasta sobrepasar el 80%.

Esto supone incrementar las infraestructuras existentes, por lo que plantea que, al menos, se creen centros de transferencia de residuos industriales en todos los polígonos industriales de más de 10 hectáreas; crear tres centros integrales de tratamiento de residuos industriales no peligrosos; crear siete instalaciones de tratamiento de residuos orgánicos biodegradables y al menos dos depósitos de rechazos de inertes, adicionales a los 10 que se crearían con las instalaciones precedentes.