Tecnología España , Salamanca, Lunes, 24 de mayo de 2010 a las 15:47

En busca de aplicaciones interactivas para la TDT

La empresa salmantina GPM desarrolla nuevos servicios para TDT, que permiten desde teleasistencia hasta pedir una pizza

José Pichel Andrés/DICYT Una vez que se ha completado el apagón analógico y que toda la televisión que se ve en España de forma gratuita es Televisión Digital Terrestre (TDT), el siguiente paso es desarrollar los servicios interactivos que puede ofrecer esta tecnología. Por el momento, apenas han calado entre los potenciales usuarios (aunque existen algunas no son conocidas), pero algunas empresas están apostando por estas aplicaciones, entre ellas, la salmantina GPM, que tras orientar su I+D+i a servicios de teleasistencia, busca nuevos campos para desarrollar las posibilidades de la TDT: desde pedir una pizza a implementar nuevas opciones publicitarias.

 

La apuesta por la TDT comenzó ya en 2004 y desde un primer momento el objetivo fue la teleasistencia, puesto que a través de los estudios de mercado la empresa detectó que era una de las mejores opciones en un entorno de población envejecida y dispersa como Castilla y León. La idea era ofrecer más calidad de vida a través de las nuevas tecnologías, permitiendo que las personas mayores puedan disponer de los recursos sanitarios al alcance de la mano a la vez que se evita la sensación de soledad. Frente al ordenador y sus complejidades, "la televisión es un medio no hostil para las personas mayores y el mando es un elemento que se puede manejar con mayor facilidad que un teclado", explica a DiCYT Emilio Vicente, responsable de Desarrollo de Negocio y Administraciones Públicas de GPM Innovación y Desarrollo.

 

Así, en colaboración con la Fundación Caja Duero y gracias a la financiación del Plan Avanza, del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, GPM participa en el diseño de un Centro Virtual de Teleasistencia Multidispositivo, cuyos servicios pasan por la posibilidad de pedir cita a través de la TDT, comprobar la medicación, revisar la historia clínica y realizar telemonitorización,entre otras opciones.

 

Un ejemplo de las posibilidades que ofrece este sistema es un test de evaluación del deterioro neurocognitivo. "El usuario tiene que contestar una serie de preguntas y el sistema realiza una evaluación inteligente de las respuestas, de manera que, en función de las mismas, decide si pasa a un ejercicio o a otro", explican los responsables de la idea. Se trata de ejercicios de concentración, memoria y aprendizaje y los resultados se monitorizan, de manera que a lo largo del tiempo se puede apreciar si hay deterioro cognitivo. Además, estas pruebas se pueden realizar en casa en presencia de un acompañante habitual, que puede percibir por sí mismo si hay alguna evolución.


Ésta y otras aplicaciones sanitarias se desarrollan en colaboración con la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León y por el momento están en pruebas, pero podrían implementarse en un futuro. El proyecto surge en el contexto de la Ley de Dependencia y en su desarrollo participan profesionales de diferentes especialidades, como la Pedagogía, la Psicología o la Geriatría.

 

Pedir comida con el mando a distancia

 

Sin embargo, la compañía GPM trata de explorar muchas otras posibilidades en torno a las aplicaciones interactivas de la TDT, entre ellas, algunas muy relacionadas con el hecho de ver televisión. Por ejemplo, ver un partido y pedir una pizza, sin duda, dos acciones complementarias que se convertirán en cotidianas en muchos hogares en el próximo Mundial de fútbol. ¿Y si tuviéramos la posibilidad de realizar el pedido sin descolgar el teléfono, a través de un programa diseñado para la TDT? Aunque todavía no está en el mercado, los informáticos salmantinos ya lo han diseñado. Con el mando se pueden dar todos los pasos, desde elegir los ingredientes, dar la dirección del domicilio y confirmar el pedido.

 

Para ello, el usuario sólo necesitaría en su casa un descodificador interactivo que permitiese mandar los datos, similar a los aparatos que se usan para ver la televisión de pago. Por su parte, la pizzería correspondiente sólo tendría que tener instalada su parte del programa en los ordenadores para recibir el pedido.

 

Infinidad de aplicaciones de publicidad interactiva

 

Por otra parte, estas nuevas aplicaciones interactivas ofrecen unas posibilidades casi ilimitadas para revolucionar el mundo de la publicidad y en ellas también está trabajando la sección de I+D+i de la compañía. "Imaginemos que el usuario de antes, que está viendo el partido de fútbol, recibe un mensaje en el descanso en su televisor sugiriéndole la posibilidad de pedir la pizza", proponen. Pues bien, ésta es otra de las líneas en las que trabaja la empresa, la posibilidad de ofrecer publicidad interactiva o bidireccional. Así, un espectador puede ver un anuncio de un automóvil y que, al hacerlo, aparezca un mensaje en pantalla como ¿Quieres conocer más de este coche?. Si decide que sí, podría conocer, por ejemplo, el catálogo que ofrece la empresa anunciadora.

 

En todos estos aspectos trabaja GPM, con múltiples salidas comerciales y de interés para todo tipo de empresas. El único inconveniente que se presenta para poder desarrollar estas iniciativas con éxito es la poca difusión que ha tenido la parte interactiva de la TDT y el escaso mercado de los descodificadores apropiados, aunque los expertos confían en su popularización en los próximos años.