Alimentación España , Salamanca, Martes, 06 de junio de 2006 a las 14:59

Expertos de la Universidad de Salamanca analizan la administración de fármacos a celíacos

Cerca de 200 salmantinos padecen algún tipo de intolerancia al gluten y otras proteínas presentes en el trigo, la cebada o el centeno

AVPR/DICYT La enfermedad celíaca afecta a una de cada cien personas, por lo que, según datos de la Asociación de Celíacos de Castilla y León, existen cerca de 200 salmantinos con esta patología que se ven diariamente obligados a excluir de su dieta cualquier alimento o bebida que contenga gluten. Una proteína presente en cereales como el trigo, la cebada o el centeno que, cada vez con más frecuencia, se oculta en alimentos y bebidas, pero también en otros productos destinados al consumo como son los fármacos. Instruir a celíacos y personal farmacéutico en la identificación de estos medicamentos y en el conocimiento de sus sustitutivos es sólo una de las cuestiones que se tratarán en Salamanca los días 8 y 9 de junio en el marco de las I Jornadas para la Detección Precoz de la Enfermedad Celíaca.

 

"La enfermedad celíaca no es una alergia alimentaria, como se piensa comúnmente, sino una intolerancia crónica al gluten que contienen determinados cereales", explica a DICYT Carlos García Pérez-Teijón, profesor de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Salamanca y uno de los ponentes. "Se trata de una enfermedad hereditaria autoinmune, en la cual el revestimiento del intestino delgado, concretamente las vellosidades intestinales, resulta dañado en respuesta a la ingestión de esta proteína, lo que dificulta la absorción de nutrientes a las personas afectadas", explica el profesor. Como resultado, varios sistemas de otros órganos también pueden terminar afectados y es común que estos enfermos presenten un tipo específico de dermatitis herpetiforme, alguna afección nefrítica e incluso artritis.

Según los datos médicos, la enfermedad celíaca puede manifestarse en diferentes etapas de la vida de una persona, aunque su diagnóstico es mucho más claro en niños. García Pérez-Teijón comenta: "los síntomas con los que estos pequeños llegan a una consulta de pediatría son muy reconocibles, ya que el abdomen está mucho más abultado de lo habitual en el caso de los bebés, a pesar de que suelen ser niños delgados, y es fácil que presenten un retraso en el crecimiento. Estos son los primeros indicios para sospechar que estamos ante un paciente con enfermedad celiaca, aunque deben ser confirmados por los resultados de una analítica y una posterior biopsia intestinal". Una vez diagnosticadas, estas personas deberán cuidar su dieta durante toda su vida, evitando la ingesta de gluten, "ya que no existen tratamientos farmacológicos para la misma y la enfermedad no se revierte con el tiempo".

Vigilar la dieta y la medicación

Los procesos de fabricación industrial que en las últimas décadas son parte de cualquiera de las cadenas de producción de las empresas alimentarias hacen cada vez más complejo saber si un alimento contiene gluten. Las harinas de cereal no son ya exclusivas en panificadoras, pastelerías o fabricantes de pastas, sino que se utilizan como espesantes en la fabricación de otros muchos productos como gominolas, helados o medicamentos.

 

"La incorporación de determinados tipos de derivados de los cereales a los medicamentos, no como principios activos, sino como excipientes, es muy habitual, y en el caso del gluten o el almidón de trigo su presencia es de declaración obligatoria, por lo que los farmacéuticos y los propios pacientes pueden identificar estas sustancias sin problema", explica Carlos García, y añade, "en cualquier caso, es importante instruir a los afectados y a los farmacéuticos acerca de estos productos y de las alternativas que existen a los mismos. En ocasiones, algunos comprimidos o preparados solubles, que deben ser ingeridos, pueden sustituirse por un fármacos cuya aplicación se realiza por vía cutánea, con lo que la presencia de gluten deja de ser un problema".

 

Jornadas abiertas
La organización de las I Jornadas para la Detección Precoz de la Enfermedad Celíaca, que se desarrollarán los días 8 y 9 de junio en el aula menor de la Hospedería del palacio Fonseca, corre a cargo de la Asociación de Celiacos de Castilla y León, la Universidad de Salamanca y el Ayuntamiento de la ciudad, con los que ha colaborado la Fundación General de la institución académica salmantina. Todas las instituciones implicadas han querido dejar abierta la asistencia a estas charlas, facilitando a los asistentes información sobre aspectos como la incidencia de la enfermedad, sus implicaciones hormonales o las nuevas tecnologías aplicadas a la detección de gluten en los alimentos.