Alimentación España , Salamanca, Viernes, 04 de julio de 2008 a las 17:58

La Bioingeniería, nueva técnica para restaurar riberas y zonas húmedas

La Universidad de Salamanca pone fin hoy a un curso sobre la conservación de estas zonas

JPA/DICYT Las técnicas de Ingenería que utilizan los recursos vegetales se están implantando en los últimos años como solución para restaurar riberas y humedales, según ha descrito hoy un experto en la clausura del curso de verano Técnicas de restauración y conservación de ríos y riberas: teoría y experiencias prácticas, que ha impartido esta semana la Universidad de Salamanca en Villamayor de la Armuña. La denominada Bioingeniería combina los conocimientos de varias ciencias al servicio de la recuperación de los ecosistemas.

 

Las técnicas de restauración de riberas y humedales son múltiples pero la Bioingeniería se aplica en el ámbito fluvial con vistas al control de la erosión, la estabilización de los márgenes y a hacer posible procesos de revegetación, según ha enumerado en declaraciones a DiCYT Vicente Paredes, director técnico de la empresa Hydra, Ingeniería y Gestión Ambiental. "La Bioingeniería es una disciplina de la Ingeniería relativamente novedosa que se nutre de otras ciencias, aparte de los conceptos de Ingeniería Civil, incluyendo conceptos de Hidráulica, de Biología o de Ecología, y cuya componente común es que utiliza materiales vegetales como elemento constructivo común, tanto vivos como muertos, tanto solos como en combinación con otros materiales", ha señalado el especialista.

 

Entre las numerosas técnicas que existen, está el estaquillado, un método de multiplicación vegetal que consiste en aprovechar un trozo de una planta, por ejemplo, el tallo, para conseguir que emita raíces y formar un nuevo individuo. Otras técnicas muy comunes son las empalizadas trenzadas, que consisten en vegetación leñosa, o las mantas orgánicas que vemos en las autovías, utilizadas para recubrir taludes grandes de desmonte con el objetivo de controlar la erosión, "un gran ejemplo de técnica de ingeniería, según Vicente Paredes.

 

Dentro de estas técnicas, hay algunas que se usan con más frecuencia en el caso de los humedales, como los sistemas de cubiertas de hierba o herbazales o los llamados biorrollos de vegetación. En todo caso, estas técnicas constituyen solamente "una herramienta, como puede ser un muro de hormigón, aplicable a mil sitios diferentes, aunque tienen objetivos concretos. En opinión del experto, "cualquier actuación de Bioingeniería es susceptible de utilizarse en una zona húmeda, en un río o en un talud".