Tecnología España , Valladolid, Martes, 02 de noviembre de 2004 a las 19:49

La energía solar proporcionará agua caliente a otros cuatro hospitales de la región

El acuerdo firmado entre la Consejería de Sanidad y el Ente Regional de la Energía permitirá un ahorro del 10%

BGA/DICYT El Ente Regional de la Energía (EREN) y la Consejería de Sanidad y Bienestar Social han firmado un acuerdo que permitirá a cuatro hospitales de la región ahorrar un 10% en la factura correspondiente al agua caliente, a través de un sistema de paneles solares que captarán la energía solar para convertirla en energía válida para calentar el gran volumen de agua que manejan los centros sanitarios.

El acuerdo establece que el EREN asume la responsabilidad técnica, inversión y titularidad del proyecto hasta su amortización, y para que dicho organismo pueda rentabilizar la inversión se ha estipulado que la facturación del 90% de la energía generada por la instalación revierta en el EREN, mientras que el 10% restante será el que realmente se utilice para cubrir las necesidades de cada uno de los hospitales.

Hasta el momento ya hay dos centros que disponen de instalaciones solares: el Hospital de Nuestra Señora de Sonsoles de Ávila y el Hospital El Bierzo. Y está previsto que a lo largo del 2005, se realicen cuatro nuevas instalaciones de paneles en el Hospital Comarcal de Medina de Campo; el Santos Reyes de Aranda de Duero y el Hospital Virgen de la Concha de Zamora, así como en el complejo hospitalario de Segovia.

La energía servirá para generar agua caliente, que puede ser utilizada para calentar el agua sanitaria de consumo en duchas, lavabos, bañeras, lavanderías, etc. Para ello se emplearán captadores solares térmicos cuyo funcionamiento se basa en el calentamiento de una superficie metálica absorbente de la radiación solar, que, a su vez, calentará el fluido contenido en su interior. Para mejorar el rendimiento del panel, éste incorpora un cristal que favorece la captación de la radiación solar, también llamado efecto invernadero, y la protección frente a los agentes externos, a la vez que es aislado térmicamente para evitar las pérdidas energéticas de calor hacia el exterior.

La vida útil de las instalaciones solares suele ser larga, superior a 20 años, por lo que una vez amortizado el proyecto, el EREN pasaría a los hospitales titularidad de la instalación, quién se beneficiará, hasta el fin de su vida útil, de la totalidad del ahorro generado por la instalación solar.