Tecnología España , Ávila, Viernes, 19 de noviembre de 2004 a las 15:23

La Escuela Politécnica Superior acerca los avances en autómatas celulares

Se trata de sencillos modelos computacionales capaces de resolver problemas muy complejos, como simular el comportamiento de un incendio

AVPR/DICYT El profesor Ángel Martín del Rey, del Departamento de Matemática Aplicada de la Universidad de Salamanca, dirige el curso Aplicación de los autómatas celulares a la ingeniería, que comenzará esta misma tarde en la Escuela Politécnica Superior de Ávila y que se prolongará hasta el próximo día 11 de diciembre. Según ha confirmado a DICYT el profesor del Rey, los autómatas celulares "son una materia muy específica, pero con múltiples aplicaciones en el mundo de la ingeniería, ya que utilizan modelos de computación muy simples para resolver problemas complejos. En cualquier caso su especificidad ha llamado la atención de 17 alumnos que son los que se han matriculado por el momento".

Los participantes en el curso no necesitan conocimientos matemáticos especialmente relevantes ,debido a la sencillez de los modelos que se van a enseñar. Según ha comentado Ángel Martín del Rey, "básicamente, el objetivo fundamental es mostrarles una técnica matemática relativamente reciente que es muy potente a la hora de simular multitud de procesos y fenómenos físicos, y que les puede ser de utilidad". Entre los profesionales que impartirán el curso, además de varios profesores de la Universidad de Salamanca, se encuentran expertos en este tipo de sistemas como Sara Hoya, de Iberdrola, y Luis Hernández Encinas, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

Durante los días en los que se desarrollará el curso, los asistentes tendrán oportunidad de conocer el funcionamiento de estos sistemas así como las aplicaciones más concretas. Un autómata celular es un sistema dinámico formado por celdas, cada una de las cuales varía sus condiciones cada cierto tiempo y en función de un cálculo que realiza con los datos que recibe de las celdas que la circundan.

"Aunque parece muy complejo y abstracto, es un modelo con muchas aplicaciones. Las más comunes son, por ejemplo, la predicción del comportamiento de un incendio o de un flujo de lava o agua", explica Martín del Rey.

Anticiparse a los movimientos del fuego 
Los autómatas celulares se han aplicado en numerosas ocasiones para desarrollar simulaciones por ordenador del comportamiento de un incendio. Para ello, se divide el terreno afectado por el fuego en diferentes celdas. En cada una de estas celdas se marcan tres valores, que condicionarán el comportamiento del fuego en ese espacio: la inclinación del terreno, la cantidad y calidad del combustible que encuentran las llamas y la dirección del viento.

La parte más compleja es la de crear una ecuación matemática capaz de realizar el cálculo con todas las variables posibles cada cierto tiempo. En función del resultado de la ecuación se verá si el fuego avanza en uno u otro sentido.