La Universidad de Salamanca participará en el Año Polar Internacional con un proyecto de investigación paleoclimática
Ana Victoria Pérez/DICYT El paleontólogo de la Universidad de Salamanca José Abel Flores Villarejo ha sido nombrado recientemente coordinador del área de Geología en investigación oceánica dentro del Comité Científico Español para la Investigación en la Antártida (SCAR) que preside el científico Jerónimo López. Creada y financiada recientemente por el Ministerio de Educación y Ciencia, la delegación española de este comité científico internacional tendrá como misión coordinar los trabajos que diferentes grupos científicos españoles desarrollan en el continente blanco, además de ser el organismo que representará a España durante el Año Polar Internacional, que se celebrará en el bienio 2007-2008.
Pero la participación de la Universidad de Salamanca en los actos del Año Polar Internacional va más allá de la incorporar a uno de sus profesores a dicho comité, ya que tal y como ha explicado a DICYT José Abel Flores, "el equipo de micropaleontólogos de la universidad está, en estos momentos, perfilando su participación en un proyecto internacional denominado Bipomac". Se trata de un proyecto pluridisciplinar, que se desarrollaría en estrecha colaboración con los equipos alemanes del Alfred Wegner Institute for Polar and Marine Research, y en el que también participan otras 30 instituciones científicas internacionales. Su objetivo se centra en analizar los últimos ciclos climáticos que se han registrado en el Océano Antártico, para posteriormente coordinar los resultados de estas investigaciones con los procedentes de las muestra recogidas en el Ártico.
"Las peculiaridades del Ártico, que es en realidad un mar helado cuya cuenca carece de movimiento interno, han merecido menor atención por parte de los científicos, eso sin contar las dificultades que entraña el trabajo en esas condiciones. De ahí que la primera campaña en la que se ha accedido con varios rompehielos al centro del Océano Polar Ártico para recoger muestra de sedimentos de hace 40 millones de años se haya producido el verano pasado", explica Flores. Dichas muestras serán, sin embargo, un elemento clave cuando los expertos analicen los datos que se desprendan de ellas, ya que la información obtenida podrá compararse con los registros que diversos grupos internacionales en la Antártida, hasta determinar, por ejemplo qué condiciones climáticas existían antes de que ambos polos comenzasen a helarse.
La mala salud del Hespérides
Aunque aún no se ha aprobado una partida presupuestaría concreta para que los investigadores salmantinos desarrollen las campañas de estudio geofísico del fondo oceánico y de extracción de muestras, los responsables del proyecto han explicado a DICYT algunos detalles de las expediciones. Así José Abel Flores explica que "se han programado dos salidas hacia la Antártida, la primera de ellas debería realizarse a bordo del Hespérides, y tiene como objetivo realizar un estudio geofísico de los fondos marinos, para identificar los lugares en los que posteriormente se realizarán las prospecciones. La segunda salida embarcará a los miembros de la expedición española a bordo del buque alemán Polarstern y durante la misma nos dedicaríamos a la extracción de muestras".
Pero los planes de los investigadores se encuentran todavía en el aire, ya que la mala salud del Hespérides lo mantiene de nuevo en tierra. Según fuentes del Ministerio de Educación y Ciencia, aún no hay plazos concretos para que el busque español vuelva de nuevo a navegar, por lo que el equipo salmantino se prepara por si el tiempo que pasarán en el Polarstern debiera repartirse entre el estudio geofísico y la toma de muestras. José Abel comenta, "al menos sabemos que el Año Polar Internacional ha motivado a las administraciones españolas que ya han marcado como misiones prioritarias para el Hespérides las campañas antárticas".
Un proyecto global | |
El Año Polar Internacional que se celebrará durante el bienio 2007-2008 es una iniciativa puesta en marcha por la comunidad científica internacional con el único objetivo de coordinar, contextualizar y optimizar los trabajos que se desarrollan en ambos Polos. A imagen y semejanza del Año Geofísico Internacional celebrado hace medio siglo, investigadores de todo el mundo pretenden aunar esfuerzos para mejorar los trabajos en el continente Antártico y en el Océano Polar Ártico, ya que de los resultados de sus investigaciones podrían desprenderse claves muy relevantes acerca de la evolución climática. |