Los delincuentes informáticos que antes buscaban notoriedad ponen hoy sus miras en el dinero

Rubén Arranz/DICYT Hace unos años, cuando internet era utilizado por muchos menos millones de personas que en la actualidad, el afán de los delincuentes informáticos era hacerse notar, para lo que creaban destructivos virus, como fue Iloveyou, con el que inutilizar la mayor cantidad posible de ordenadores. Hoy, con una red globalizada y en la que se mueve una inmensa cifra de negocio, su objetivo ha cambiado y aprovechando el protagonismo que internet ha cobrado en la vida de las personas pretenden ganar dinero mediante diferentes técnicas ilícitas. Aplicar el sentido común a la hora de navegar en la red de redes es fundamental para evitar ser víctima de la acción de estos delincuentes, cada vez más organizados y con herramientas más sofisticadas.

Las bandas han visto en este medio un blanco perfecto para cometer sus fechorías y se han dotado de una infraestructura suficiente para ejecutar todo tipo de acciones ilícitas en internet, incluso sin ser expertos en nuevas tecnologías. “Antes, el delincuente se metía personalmente en tu ordenador y te robaba. Ahora todo es más sofisticado y hay gente que se dedica a crear software malicioso y a vendérselo a otras personas, o a estafar a gente o a blanquear dinero para otras. Todo es mucho más complejo y por eso tenemos que ser prudentes y cuidadosos", ha explicado Pablo Pérez, director del Observatorio de la Seguridad de la Información del Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (Inteco), en una entrevista a DiCYT concedida con motivo del Día Internacional de la Seguridad de la Información.

En paralelo, los hackers cada vez hacen las cosas mejor, por lo que prevenir sus acciones ya no es tan sencillo. Hace unos años creaban virus y la labor de los especialistas consistía en "hacer una vacuna" para prevenir esa infección. Actualmente, con las múltiples amenazas existentes, se han diversificado los esfuerzos y buena parte de la lucha contra la acción de los delincuentes informáticos se basa en acciones predictivas de los peligros, en la aplicación de la inteligencia colectiva o en la observancia de lo que está ocurriendo en determinados sitios para, en caso de que se vean afectados por un virus, poder actuar lo más rápido posible.

Delitos frecuentes

Dado el crecimiento de las amenazas que ha tenido lugar últimamente en los dispositivos móviles, Pablo Pérez ha hecho un llamamiento a extremar el celo e instalar en ellos una serie de componentes de seguridad, una acción que no suele ser habitual entre la población pero que es necesaria debido a que los usuarios también acceden a internet a través de estas tecnologías e, incluso, efectúan compras.

Es frecuente que para capturar información personal los delincuentes utilicen técnicas de "ingeniería social" para engañar a los dueños de los teléfonos móviles. Para evitar riesgos, Pérez ha incidido en que se tenga especial cuidado a la hora de reenviar determinados mensajes de texto o de acceder a determinados enlaces bajo un título llamativo. En este sentido, ha avisado del peligro que suponen las herramientas -de uso creciente- que permiten acortar las direcciones (eliminan una serie de caracteres de los enlaces), ya que dificultan la identificación de la web a la que dirigen al usuario.

Otro de los aspectos que ha asegurado que hay que tener en cuenta es que también existen estas amenazas en las redes sociales. Los hackers aprovechan portales como Facebook para obtener datos de los usuarios con fines delictivos, y lo hacen, por ejemplo, enviando mensajes que incluyen un enlace que, si se "pincha", provoca la descarga de una infección en el ordenador de los usuarios. Para convencerlos de que accedan a ellos, aseguran que ese enlace dirige a una web donde se puede ver un determinado aspecto de las elecciones generales o el vídeo con la muerte de Gadafi.

Aplicar el sentido común

Ante estos riesgos a los que están expuestos los usuarios de las tecnologías de la información y la comunicación, es necesario aplicar el sentido común a la hora de utilizarlas. Como medidas de precaución, conviene tener actualizados el sistema operativo o los programas para evitar que un hacker acceda a un ordenador sirviéndose de algún agujero de seguridad. Junto a ello, es de recibo disponer de un buen antivirus o de una herramienta antispam para filtrar el correo basura, entre otras.

Además, se pueden adoptar buenas prácticas como comprobar que a la hora de enviar un correo o comprar un artículo se navegue en una página segura (https), cuidar la publicación de datos personales en la web o evitar facilitar claves o contraseñas de sitios importantes, como el de una entidad bancaria.

Jóvenes y redes sociales

En España, según datos del Instituto Nacional de Estadística del 2011, nueve de cada diez usuarios de Internet, con edades entre 16 y 24 años, participan en las redes sociales. Además, según un estudio del Observatorio de la Seguridad de la Información del Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (Inteco), los servicios avanzados que ofrecen los teléfonos inteligentes smartphones son utilizados de manera intensiva y creciente.   La gestión de la privacidad en las redes sociales es uno de los temas que merece mayor atención por parte de todos, especialmente de los usuarios más jóvenes, dada la exposición de los menores a prácticas como el ciberacoso, el sexting (envío de imágenes «comprometidas» de carácter sexual a través de dispositivos móviles) o el grooming (práctica de adultos para ganarse la confianza del menor a través de Internet con el fin de obtener concesiones de índole sexual), ha trasladado Inteco en una nota informativa.   Por ello, la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) de Inteco fomenta la concienciación en esta materia a través una campaña específica para los más jóvenes, Pienso, luego clico, que tiene como objetivo educar con buenos hábitos antes de actuar en Internet. En esta web se pueden encontrar trucos y consejos en materia de seguridad. Además, se ha convocado un concurso de vídeos de concienciación entre colegios de secundaria. La campaña también se extiende en páginas de Facebook y Tuenti para que los jóvenes puedan estar en contacto con la OSI y gestionar sus dudas.