Los estudios epidemiológicos y el escáner del cerebro, claves para combatir las afasias
JPA/DICYT Las experiencias clínicas y los estudios cognitivos y del lenguaje son las principales líneas de investigación con las que se combate las afasias, una afección que degrada la capacidad del lenguaje y que tiene su origen en lesiones del cerebro, generalmente producidas por embolias o trombosis. La mayor parte de los investigadores realiza investigaciones epidemiológicas, aunque en la actualidad el escáner aplicado al cerebro está abriendo nuevas líneas de estudio. Así se ha puesto de manifiesto en la inauguración del curso extraordinario Afasias versus... que ha tenido lugar en la Universidad de Salamanca con la intervención de su directora, María Elvira Santos Pérez, profesora de la Escuela Universitaria Superior de Ávila y médico foniatra en Zamora.
En declaraciones a DICYT, María Elvira Santos ha explicado que en la actualidad está realizando un estudio epidemiológico que recoge todos los casos de pacientes afásicos que llegan al complejo hospitalario de Zamora, con el objetivo de estudiar qué tipo de afasias predominan y ver sus diferentes evoluciones, en definitiva, saber "cuáles van mejor, cuáles peor, y cuáles se van recuperando". El trabajo se prolongará durante algún tiempo, porque "en un paciente afásico la rehabilitación lleva al menos dos años", ha afirmado. En el mismo sentido, en la Facultad de Psicología de la Universidad de Salamanca la profesora María Victoria Perea Bartolomé dirige desde hace más de dos años en un estudio epidemiológico similar.
Sin embargo, en el aspecto clínico la investigación más novedosa la proporciona el escáner. La tomografía por emisión de positrones, llamada PET (de acuerdo con las siglas en inglés de Positron Emission Tomography), consiste en obtener imágenes fisiológicas basadas en la detección de radiación por positrones, que son pequeñas partículas emitidas por una sustancia radiactiva que se le administra al paciente. Este sistema permite ver qué áreas del cerebro de los pacientes, en este caso de los que sufren afasia, están afectadas sin tener que hacer craneotomías (cirujía a través de un orificio en el cráneo) ni producir lesiones internas. Se pueden estudiar así las zonas lesionadas, que "no están tan definidas ni son específicas como se había pensado, ya que no todos tenemos el mismo área en el mismo sitio exactamente", comenta la directora.
No obstante, María Elvira Santos considera que hay que hacer énfasis en el estudio de las alteraciones cognitivas y en los estudios epidemiológicos. A lo largo del curso extraordinario, que se prolongará hasta el día 10 de marzo, se destacará el carácter multidisplinar de este problema, ya que "para tratar bien a un afásico se necesita una valoración neurológica y psicológica, hacen falta logopedas, médicos rehabilitadotes, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y sociólogos", señala la especialista.