Más de 40 personas participan en la restauración de las lagunas esteparias de Tierra de Campos
CGP/DICYT A través del proyecto nacional Árboles, Custodia del Territorio y Voluntariado, promovido por la Fundación Biodiversidad, en los próximos seis días más de 40 personas participarán en la restauración forestal de las lagunas esteparias localizadas en Tierra de Campos, en la provincia de Palencia. En concreto, se trabajará en los humedales de Boada, Prao de Boada y la Nava de Pedraza, donde se plantarán 2.600 nuevos árboles y arbustos de diez especies diferentes.
En proyecto Árboles, Custodia del Territorio y Voluntariado tiene por objetivo reducir los efectos del cambio climático y de la desertificación mediante la creación de sumideros de CO2 en forma de bosques. Se impulsa, asimismo, la implicación de los ciudadanos en la conservación de la naturaleza mediante el desarrollo, entre otras actuaciones, de iniciativas de voluntariado para incrementar la biodiversidad y proteger el patrimonio natural.
En el proyecto, que se engloba en el Año Internacional de la Biodiversidad, participarán los voluntarios de la asociación Aldama de Palencia, con sede en Baquerín de Campos; con los que además de la reforestación de los humedales con tarajes, espinos, escobas o chopos se están desarrollando otras actividades formativas de educación ambiental como la visita guiada a la casa museo de la laguna de Boada y al propio humedal o la construcción de comederos para aves. Asimismo, los días 18 y 19 de diciembre se incorporarán otros 10 voluntarios provenientes de diferentes partes de España.
Esta actuación de restauración ambiental adquiere una importancia especial al desarrollarse en una comarca como la de Tierra de Campos, carente de formaciones lineales de vegetación o pequeños bosquetes que resultan de especial importancia para la conservación de la biodiversidad, según la información de la Fundación Global Nature recogida por DiCYT.
Formación de un lago estepario | |
Los lagos esteparios surgen por la existencia de una depresión del terreno, que puede tener su origen en deformaciones de la corteza terrestre, y agua disponible para ocuparla. Según recoge la muestra, pueden iniciarse por disolución de rocas solubles en el agua, como el yeso (carstificación) y alcanzar su forma definitiva mediante la erosión producida por el oleaje y la originada por el viento (deflacción). Además, pueden asociarse al discurrir de los ríos que inundan las amplias llanuras aluviales formando tablas o tablazos. |