Tecnología México , México, Miércoles, 03 de febrero de 2010 a las 13:46

Producen combustible con aceite de cocina usado

Podría ser utilizado en vehículos equipados con motores diésel

Agencia ID/DICYT Aunque no se sabe con exactitud cuándo se agotará el petróleo explotable, especialistas de todo el mundo coinciden en señalar que es cuestión de unas cuantas décadas, por ello es necesario buscar energéticos alternativos que permitan mantener en marcha la economía. En México, investigadores del Centro de Innovación Aplicada en Tecnologías Competitivas (CIATEC) han desarrollado biodiésel a partir del aceite vegetal de desecho; es decir, del aceite usado en los restaurantes y cocinas familiares, el cual va a la basura.

 

De acuerdo con el doctor José Hernández Barajas, el biodiésel generado con este residuo podría ser utilizado en el transporte público, específicamente, en los vehículos equipados con motores diesél.

 

Para producir el combustible alternativo, el aceite vegetal de desecho se hace reaccionar con metanol, utilizando sosa cáustica como catalizador, a una temperatura de entre 50 y 60 grados. Terminado el proceso, se obtiene el biodiésel y una porción de glicerina, la cual se separa del energético, mismo que posteriormente es lavado y almacenado para cuando se desee usar.

 

Según el investigador, este biodiésel debe utilizarse en los primeros seis meses después de su producción, en caso de que desee usarse después de este lapso, el combustible debe analizarse en el laboratorio para estar seguros de sus propiedades y de que funciona.

 

Para el desarrollo del energético, además de los recursos que el CIATEC recibió del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y del gobierno de Guanajuato, se tuvo financiamiento de la empresa guanajuatense de transporte Flecha Amarilla y de un particular: Juan Carlos Lomelín, quien además consiguió la materia prima para realizar el trabajo de laboratorio y producir el combustible.

 

Próximas pruebas

 

Sobre cuándo el biodiésel generado con aceite usado de cocina estará disponible, el especialista del departamento de materiales de este Centro Público de Investigación del Conacyt dijo que posiblemente será Flecha Amarilla la primera empresa en utilizar el producto. Para ello, hace falta que el académico realice aún estudios que garanticen a los empresarios que los motores de sus autobuses no sufrirán daño alguno si se les suministra el biodiésel. Estas pruebas podrían estar listas el próximo año.

 

Si el producto satisface a los propietarios de la empresa, tendría que construirse una planta productora del energético y buscarse una fuente constante y abundante de materia prima. Actualmente, comentó Hernández Barajas, sin un gran proveedor del aceite usado de cocina sólo se podría generar una cantidad pequeña de biodiésel, con la cual no se podría sustituir al diésel de petróleo por completo; no obstante, el poco biodiésel disponible podría mezclarse con el combustible fósil.

 

“El biodiésel se puede combinar en muchas proporciones con diésel de petróleo. Por ejemplo, podemos llenar el tanque de un autobús con 90 por ciento de diésel de petróleo y 10 por ciento de la alternativa desarrollada, o con 80 por ciento de diésel y 20 por ciento de biodiésel, lo que reduciría entre 15 y 20 por ciento la emisión de óxidos de azufre de los vehículos, lo que representaría un beneficio para el medio ambiente”, expuso el especialista del CIATEC.

 

Ventajas ecológicas

 

Además de que el biodiésel tiene ventajas ecológicas, otra de sus cualidades es que la materia prima con que se produce es renovable; además, el combustible genera una menor cantidad de gases, lo que reduce el riesgo de explosiones durante su almacenamiento. Por otro lado, para su uso no es necesario hacer modificaciones a los motores de diésel de petróleo actuales.

 

Entre sus desventajas, las cuales reconoció el especialista, es que presenta problemas de fluidez a bajas temperaturas; es decir, puede congelarse en condiciones severas de frío (cercanas o menores a 0°C), sólo puede almacenarse seis meses y la materia prima con que se produce no es fácil de conseguir por ahora y su costo aún es elevado en relación con el petróleo, pues finalmente el origen del biodiésel es el aceite vegetal, el cual se importa en mayoría y cuyo litro cuesta en el país entre 20 y 25 pesos.

 

Pese a estos inconvenientes, señaló que realizar proyectos de este tipo tiene utilidad para el futuro del país, pues “debemos estar preparados para cuando se acabe el petróleo y seguir trabajando para eficientar la producción de biodiésel y que su costo sea lo más bajo posible, de modo que tenemos que desarrollar el campo y así tener acceso a materias primas más baratas capaces de producir combustible”, concluyó.