Tecnología España , Salamanca, Lunes, 16 de julio de 2012 a las 14:34

Una aplicaci贸n para m贸viles detecta accidentes y avisa a los servicios de emergencia

La Universidad Pontificia de Salamanca ha desarrollado un sistema para Windows Phone que avisa a los servicios de emergencia en caso de que un veh铆culo sufra un percance

PAD/DICYT GAT (Gestión de Accidentes de Tráfico) es el nombre de una aplicación desarrollada en el marco del Club Universitario de Innovación 2012, organizado por la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA), que pretende favorecer y acelerar la actuación de los servicios de emergencia en caso de accidente proporcionando la localización exacta del siniestro, así como los datos personales y médicos del propietario del teléfono.


Las características de los smartphones que se comercializan actualmente han permitido el desarrollo de esta aplicación, que para detectar el accidente aprovecha el acelerómetro, un sensor que detecta la posición del teléfono, y el giroscopio, un sensor que detecta la fuerza aplicada al cambiar de posición el teléfono. Ambos se incluyen actualmente en el diseño de estos aparatos.

 

Javier García Bellido y Enrique Honorato Morán, estudiantes de la Universidad Pontificia y responsables del proyecto, realizaron un registro de los datos aportados por estos dos sensores dentro del uso normal del teléfono, y después provocaron accidentes a pequeña escala mediante un prototipo instalado en un coche teledirigido, obteniendo un patrón común a todos los accidentes, según han explicado en declaraciones a DiCYT. 

 

De este modo, la aplicación puede discriminar entre una situación de accidente y una normal, aunque los autores han destacado que en esta fase de desarrollo es posible que la caída del teléfono pueda activar la aplicación, ya que la energía de un accidente con el coche radiocontrol es muy inferior a la que se produce en un choque con un vehículo real. En cualquier caso, si finalmente se llega a comercializar el producto, se realizarán ajustes de las gráficas con choques a gran escala.


Detectado el accidente, la aplicación lanza una cuenta atrás de 20 segundos durante la cual se puede anular el envío del aviso si por ejemplo el accidente no ha sido grave o el dispositivo se ha activado por error (por una caída del teléfono, por ejemplo). Si no se anula, se envían a los servicios de emergencia los datos personales y sanitarios del usuario y la localización GPS del dispositivo. Los datos que se introducen al configurar el programa son nombre, apellidos, DNI, grupo sanguíneo y alergias. “Son los datos más significativos que nos han comentado en el 112 para reducir el tiempo de salvamento en un accidente”, declaran García Bellido y Honorato Morán.


La idea original fue de los dos autores, aunque descubrieron que se estaban desarrollando aplicaciones similares para coches, como el sistema eCall. La desventaja de estos sistemas es que son fijos, no pueden cambiarse de un vehículo a otro. Por sugerencia del profesor responsable de este proyecto, Miguel Ángel Sánchez Vidales, los alumnos decidieron desarrollar el sistema para dispositivos móviles, que tienen la ventaja de que se pueden trasladar de un vehículo a otro. El único requisito para favorecer el funcionamiento de la aplicación es que se sujete a un soporte, como el utilizado actualmente para los navegadores GPS.


Problemas técnicos y legales


Durante el desarrollo de la aplicación se han encontrado con varios problemas, tanto técnicos como legales. El principal problema técnico es que la plataforma Windows Phone solicita siempre la confirmación del usuario para realizar cualquier envío de datos. Suponiendo que si el propietario del móvil ha sufrido un accidente éste puede estar incapacitado para activar la confirmación del envío, García Bellido y Honorato Morán han configurado un sistema para saltarse este paso. Un problema legal que aún deben solventar es que los datos personales y médicos no deben estar accesibles a terceros, por lo que deben enviarse encriptados.


Aunque por el momento no se han realizado contactos con empresas interesadas en la comercialización de la aplicación, los autores pretenden seguir desarrollándola, solucionando los problemas detectados y ampliando las plataformas para las que está disponible. En este sentido, pretenden buscar la colaboración de una empresa automovilística para mejorar la detección de accidentes, y la del 112 para mejorar la gestión de datos.