Una salmantina del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas expone sus estudios sobre cáncer de vejiga
JPA/DICYT La salmantina Marta Sánchez-Carbayo, jefa del Grupo de Marcadores Tumorales del Programa de Patología Molecular del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), ha expuesto hoy en el Centro de Investigación del Cáncer (CIC) de Salamanca algunos de sus estudios sobre el cáncer de vejiga. La científico trabaja en la obtención de marcadores moleculares en fluidos biológicos, es decir, estudia sustancias que pueden encontrarse en la sangre o en la orina de pacientes con tumores vesicales.
En declaraciones a DICYT, ha explicado que en su laboratorio se han realizado media docena de estudios relacionados con el cáncer de vejiga en el año y medio que ha transcurrido desde que ha regresado de Estados Unidos, donde ha trabajado en varios centros punteros. "Algunas de las investigaciones iniciadas allí tienen continuidad ahora aquí. Por ejemplo, utilizamos distintas técnicas de Proteómica para intentar medir muchos genes y proteínas a la vez, y ver cómo están alteradas estas sustancias en el cáncer de vejiga a lo largo de la progresión de la enfermedad. Estos datos se pueden utilizar para estratificar mejor a los pacientes", añade.
Una línea de las líneas de investigación más fuertes del laboratorio que dirige es la que trata de "identificar cuáles son las huellas moleculares características de los tumores más agresivos en cáncer de vejiga. Podemos medir muchas proteínas a la vez en el suero de pacientes con cáncer de vejiga, ya que del suero se puede obtener una muestra no invasiva que permite monitorizar a los pacientes y predecir la progresión de la enfermedad de manera poco dolorosa para el paciente y muy fácil de obtener", afirma.
Marta Sánchez-Carbayo ha explicado que sucede lo mismo con otros fluidos corporales, como la orina. Los resultados ayudan a obtener un diagnóstico precoz y más adecuado, así como a la monotorización de la enfermedad, la predicción de respuesta a distintos tratamientos y la predicción de supervivencia. El laboratorio que dirige la investigadora salmantina también se ocupa de otras líneas de estudio, como la manipulación in vitro de genes supresores de tumores, los que protegen al organismo de la proliferación del cáncer.