Alimentación España León, León, Jueves, 31 de enero de 2008 a las 17:15

Caja España edita una guía de aves amenazadas en Castilla y León

Urogallo, águila imperial y cigüeña negra son las especies más amenazadas de la región, donde no existe un listado de aves en peligro

IGC/DICYT La Obra Social de Caja España ha editado la cartilla de divulgación número 24, dedicada en esta ocasión a las aves amenazadas de Castilla y León. La publicación, que se presenta hoy en León, recoge un listado de 50 especies, sus hábitats y un listado de amenazas, entre las que se encuentran la extensión de los regadíos, la construcción o los tendidos eléctricos. Las especies en mayor peligro de extinción son el el águila imperial y cigüeña negra. En la provincia de León destacan el urogallo y el águila azor perdicera.

 

Según Yvette Lorenzana, bióloga y autora del libro, los criterios para seleccionar las especies amenazas están sacados de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (Uinc) y del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (Cnea). "Muchas de las especies incluidas coinciden según los criterios nacionales e internacionales", comentó hoy a DICYT. Los datos sobre poblaciones se extraen del Inventario Nacional de Biodiversidad, un registro actual de censos de todas las especies.

 

La publicación, ilustrada con dibujos de la propia autora, distingue entre aves nidificantes, migrantes en paso e invernantes, entre las que se encuentra el Ansar campestre, "una especie casi extinguida en Castilla y León". "Las amenazas posiblemente estén en los lugares donde nidifica el verano", explicó Lorenzana, "no donde pasa el invierno (Zamora), puesto que en la comunidad casi ya no existe".

 

Amenazas

 

Entre las principales amenazas, la bióloga distingue el cambio de usos del suelo, que "afecta sobre todo en aves esteparias". En las áreas que cambian a regadío "desaparen hábitats para poblaciones de aves (y otros predadores naturales) que serían predadoras de, por ejemplo, el topillo". Otra amenaza es la construcción de urbanizaciones, "que talan bosques fundamentales, por ejemplo, para la cigüeña negra, como ha pasado en Ávila". Los tendidos eléctricos, los envenenamientos (se calcula que el 10 por ciento de la mortandad de animales está provocado por venenos), y la caza son otros de los peligros.

 

Para hacer frente a estas amenazas, "hay que conservar los hábitats para conservar así la especie". En este sentido, la autora destacó iniciativas regionales como la elaboración de una Red de Espacios Naturales, Zonas de Especial Protección de Aves y Lugares de Interés Comunitario. Sin embargo, "en Castilla y León no hay un listado propio de aves amenazadas, se guía por la legislación nacional", resaltó Lorenzana, para quien la publicación de este libro por Caja España "tiene un interés divulgativo, no es un primer paso para un listado de aves amenazadas".

 

Los cambios en los microclimas afectan a las aves
Según la autora de la guía divulgativa Aves amenazadas en Castilla y León, Yvette Lorenzana, "los cambios de uso del suelo han provocado sinergias que han transformado los microclimas de determinadas zonas". Son estos cambios locales, y no un cambio climático a nivel global, lo que respresenta un problema para las aves, puesto que, en su mayor parte, "son cambios irreversibles". Según la bióloga, esto provoca que "se simplifiquen los ecosistemas, por lo que son más fáciles de alcanzar las puestas de huevos, puede haber más parásitos, más depredación, etcétera."