Alimentación España , Salamanca, Miércoles, 14 de diciembre de 2011 a las 19:29

"La calidad de la miel no depende de las abejas, sino de su procesado posterior"

Una jornada ha analizado en Salamanca el control de calidad y las buenas prácticas apícolas

JPA/DICYT La Facultad de Farmacia de la Universidad de Salamanca ha acogido hoy una Jornada Apícola en el que científicos, técnicos y expertos han explicado conceptos acerca del control de calidad y de las buenas prácticas que se llevan a cabo en este sector. José Sánchez Sánchez, investigador del Departamento de Botánica de la institución académica salmantina, ha asegurado que la calidad de la miel no tiene que ver con la alimentación de la abejas, sino más bien con su procesado posterior, incluyendo el uso que hace el consumidor, y que los controles científicos garantizan que no llegan al producto final elementos contaminantes. 

 

"Que unas abejas vayan a unas plantas o a otras le confiere características determinadas y muy concretas a algunas mieles, pero todas pueden tener una calidad exactamente igual", ha afirmado el experto en declaraciones a DiCYT. "Si tenemos colmenas en una plantación de eucaliptos, las abejas van a las flores y obtendremos miel de eucalipto con unas características muy determinadas; y si analizamos la calidad de esta miel, puede ser buena. Del mismo modo, otras abejas pueden estar en un campo de girasol y sucede lo mismo, pero las dos variarán en color, en olor y en sabor aunque tengan la misma calidad", agrega.


El grupo de investigación de José Sánchez Sánchez está especializado en el análisis de estas cuestiones, análisis que pueden ser físico-químicos, microbiológicos y sensoriales que resultan "imprescindibles para poder controlar la calidad de la miel". El aspecto sensorial es determinante, puesto que las personas con la formación adecuada pueden apreciar por medio de los sentidos las cualidades del producto apícola, según explica.


Desde el punto de vista de los productores no existen grandes problemas, "con que cuiden bien las abejas, perfectamente tratadas con productos adecuados y la alimentación idónea si es necesario", si bien, es importante que en la zona no haya gran cantidad de pesticidas. "Son productos alimenticios que no presentan grandes problemas de contaminaciones, si nos portamos bien con las abejas, vamos a obtener buenos productos", afirma José Sánchez. Por su parte, los consumidores también deben usarla como es debido si quieren obtener la máxima calidad, de manera que en algunas ocasiones calentarla demasiado o dejarla al sol pueden disminuir sensiblemente sus propiedades.


La jornada se ha completado con la intervención de Carlos Cordón Marcos, director técnico de la empresa Acuacord Calidad, que se ha centrado en las técnicas por las cuales los laboratorios realizan controles de calidad; y Luis María Gallego Brogeras, director general del Grupo Analiza Calidad, que ha explicado las exigencias legislativas en la trazabilidad de la miel.