La empresa zamorana Gaza, la primera en el mundo que consigue envasar leche líquida de oveja en tetrabrick
AR/DICYT La empresa zamorana láctea Gaza ha desarrollado un procedimiento, desconocido hasta ahora, para poder comercializar leche de oveja en envases de tetrabrick o también llamados de larga vida. La leche de oveja, al igual que la de cabra, “se coagula cuando se somete a altas temperaturas, por eso no se podía envasar ni someterse a procesos de esterilización o UHT”, explica José Luis Calvo, director general de la empresa.
El hallazgo de este proceso, que ha conseguido una patente mundial, ha supuesto dos años de investigación por profesionales docentes de la Universidad de Santiago de Compostela, en su campus de Lugo, y de la Universidad de Salamanca. Los dos investigadores, Sergio Martínez Alonso, de la Universidad gallega, y Concepción García Moreno de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Salamanca, estarán presentes en la jornada que se celebrará el próximo martes y que servirá para dar a conocer el procedimiento y al mismo tiempo celebrar el cuarenta aniversario de la empresa. Al acto está previsto que acudan también la ministra de Agricultura, Elena Espinosa y el consejero de Agricultura de la Junta de Castilla y León, José Valín.
El proyecto de investigación se inició hace dos años con un presupuesto de 212.000 euros de los que la Agencia de Inversiones y Servicios de Castilla y León (ADE) ha subvencionado 119.000 euros. Según los responsables de la empresa, la leche de oveja “tiene una serie de dificultades enormes para envasar porque se coagula en los procesos de calentamiento”. Sin embargo el nuevo procedimiento es también en caliente por que “a la leche siempre hay que aplicarle calor para eliminar las bacterias que pueda tener”. Sin embargo el resultado de la investigación fue un éxito y la leche se está comercializando desde el pasado mes de diciembre en formato de leche líquida semidesnatada.
La leche de oveja presenta una serie de propiedades que no tiene la de vaca. Por ejemplo, posee un porcentaje mucho más alto de grasa, hasta un 7%, por este motivo “la hemos desnatado hasta un 1,7% para que sea más adecuadas para las necesidades nutricionales del consumidor”. Superado este problema, la leche de oveja posee “unos niveles de proteínas, calcio y fósforo mucho más altos que los de vaca y otras propiedades que daremos a conocer cuando se complete la investigación que hemos ampliado”, comenta Calvo.
Un producto con mala fama | |
A juicio de los responsables de Gaza, erróneamente se creía que la leche de oveja tiene un sabor más fuerte que la de vaca, pero “eso se debe a la contaminación bacteriana”. Por ello, para que el proceso funcionara se ha realizado una labor de acondicionamiento de las instalaciones ganaderas. “Se ordeña en condiciones higiénicas absolutas que han reducido las bacterias de 70 millones por mililitro a cincuenta mil por mililitro”, añaden los investigadores. La leche de oveja se comercializará a un precio más alto que la de vaca e irá destinado a aquellos consumidores “que en estos momentos se decantan por la soja o productos alternativos que creen milagrosos”, apunta el director de la empresa. En este sentido, la investigadora de la Universidad de Salamanca, Concepción García, expilcará el próximo martes que “la leche es imprescindible para el ser humano, es fundamental para la calcificación del esqueleto y además, cubre unas necesidades básicas”. |