La investigadora Almudena Ramón Cueto presenta en el Museo de la Ciencia su estudio sobre reparación de lesiones de la médula en primates

MDS/DICYT La directora de la Unidad de Regeneración Neural del Instituto de Biomedicina de Valencia del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Almudena Ramón Cueto, ha impartido esta mañana una conferencia divulgativa en el Museo de la Ciencia de Valladolid en la que ha explicado la evolución de sus estudios sobre lesiones de médula espinal en primates, que han sido paralizados por el director del centro donde se realizaban, el Centro de Investigaciones Príncipe Felipe de Valencia, Rubén Moreno. La científica ha hecho un llamamiento a la sociedad para que muestre su apoyo y así poder continuar sus investigaciones. La web imagina.org recoge firmas por esta causa.

El trabajo de la doctora Ramón Cueto lleva por nombre Autotrasplante de glía envolvente olfatoria en primates en la terapéutica del daño espinal agudo y trata de hallar la forma de, mediante un autotrasplante, conseguir que los daños de la médula sean curados y que el primate que no tiene movilidad en una parte o la totalidad de su cuerpo la recupere. La primera fase de esta investigación se terminó en diciembre de 2004, y permitió conocer que el autotrasplante es una técnica viable. La segunda fase se planteó como objetivo probar si los trasplantes de glía olfatoria permiten reparar funcional e histológicamente las lesiones de médula en monos parapléjicos.

Así en el mes de mayo de 2006 se realizó un trasplante al primer animal, que se llamaba Chiqui. "48 horas después de la operación el animal estaba activo y se relacionaba con el medio, y un mes y medio después empezó a controlar la estabilidad del tronco y la colocación de las patas", ha asegurado la investigadora en declaraciones recogidas por DICYT. Además, se procedió a la realización de pruebas objetivas clínicas que comprobaron que había actividad eléctrica por debajo de la lesión, ha explicado la doctora Ramón Cueto. Un resultado por el que se mostró interesada la publicación especializada Science.

Pero la doctora no ha podido publicar el artículo porque en el mismo había que especificar el estado del animal en la fecha de publicación, y el animal fue sacrificado tras prohibir la entrada en el Centro Príncipe Felipe a la investigadora, el pasado 14 de julio. Las razones aludidas por el centro fueron que el mono sufría cáncer. Ante este argumento, Ramón Cueto ha explicado que el objeto del director del Príncipe Felipe "era eliminar la única prueba viva de que la investigación funciona", para lo que omitió datos al especialista que realizó el informe. 

Esta investigación se estaba realizando en el Centro de Investigaciones Príncipe Felipe de Valencia, y se desarrolla en colaboración con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y de la Junta de Castilla y León, que ha realizado varias aportaciones.