La normativa que regulará la coexistencia entre la agricultura transgénica, convencional y ecológica estará lista en 2005
SC/DICYT El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación trabaja en la elaboración de la normativa con la que se regulará la coexistencia entre la agricultura transgénica, convencional y ecológica, y que tal y como señala a DICYT Ricardo López de Haro, director de la Oficina Española de Variedades Vegetales, estará lista en el año 2005.
Con dicha normativa “se pretende facilitar la coexistencia entre los diferentes tipos de agricultura o entre los distintos agricultores que puedan sembrar cultivos transgénicos, convencionales o ecológicos”, explica López de Haro, quien matiza que “es la cuestión falta por regular dentro del marco jurídico sobre organismos modificados genéticamente”.
El cultivo de maíz transgénico en España comenzó en 1997. Desde entonces, y según asegura el director de la Oficina Española de Variedades Vegetales, “ha estado coexistiendo prácticamente sin normas, y salvo alguna contaminación aislada que se ha denunciado, no ha habido problemas”. Esta falta de normas generales encaminadas a garantizar al coexistencia de este tipo de cultivos se deben a que “la Comisión Europea elaboró una serie de recomendaciones en esta línea, dejando a los estados miembros que desarrollen las normas que consideraran oportunas en función de sus estructuras agrarias y de su climatología”.
En estos momentos, el Ministerio de Agricultura está trabajando en la resolución de cuestiones técnicas de tipo administrativo, "ya que falta por decidir si habrá que aplicar regímenes sancionadores ya establecidos, o si, por el contrario, habrá que crearlos”. En el primero de los casos, la elaboración de la normativa será más rápida, mientras que en el segundo, se tardará un poco más.
Ricardo López de Haro asegura que “la coexistencia no es un tema relacionado ni con la seguridad alimentaria ni con la seguridad ambiental, sino que es un tema ligado fundamentalmente a una cuestión económica y a una buenas prácticas agrícolas entre agricultores”. La filosofía que está detrás de cualquier norma al respecto pretende dar normas que “favorezcan la convivencia y que eviten los problemas entre agricultores”, apunta López de Haro.
En la práctica, uno de los problemas habituales en la coexistencia de distintos tipos de cultivos es la contaminación entre ellos, si una explotación de transgénicos contamina o transfiere polen a otra cercana que no los cultiva. Ante problemas de este tipo "guardar las distancias entre unos cultivos y otros, intercambiar información entre agricultores y la limpieza escrupulosa de la maquinaria que se utilice de manera conjunta” pueden ser, para López de Haro, alguna de las obligaciones o recomendaciones que se regulen en la futura normativa.