Salud España , Burgos, Miércoles, 03 de noviembre de 2010 a las 16:28

Nueva Unidad de Cirugía artroscópica y Medicina Deportiva en el hospital Recoletas de Burgos

La unidad incorpora una nueva técnica, la artroscopia de cadera, para la prevención de la artrosis

ERM/DICYT El hospital Recoletas de Burgos ha puesto en funcionamiento la Unidad de Cirugía artroscópica y Medicina Deportiva dirigida por el doctor Pérez Carro, según informó hoy el Grupo Recoletas. Esta unidad desarrollará tratamientos artroscópicos de todas la lesiones articulares: hombro, codo, muñeca, cadera, rodilla, pie, tobillo... La última innovación técnica que ha incorporado este grupo es el tratamiento de atrapamiento femoroacetabular de la cadera mediante artroscopia. Ésta es una patología que si se detecta de forma precoz y se trata lo suficientemente temprano evita, por lo general, el desgaste articular (artrosis) y la lesión del cartílago.

 

Las técnicas artroscópicas ofrecen mejores resultados que las técnicas abiertas, ya que con dos o tres mínimas incisiones, para introducir una microcámara e instrumental de microcirugía artroscópica, se consigue eliminar el tejido enfermo que provoca la lesión permitiendo al paciente ahorrarse las molestias inherentes a la cirugía abierta. Las principales ventajas que aporta la artroscopia se centran básicamente en el menor sangrado, la menor tasa de rigidez y de molestias por adherencias, el mínimo dolor y una probabilidad de infección casi nula además de la incorporación del paciente de una forma más rápida a la actividad laboral y deportiva.

 

El atrapamiento femoroacetabular, conocido en la literatura médica como impigement, se manifiesta en el adulto joven, habitualmente en la tercera década de la vida. El afectado sufre un dolor inguinal: a veces irradiado hacia la parte externa de la cadera y otras hacia la cara interna. Actualmente se ha comprobado que una deformidad de la transición de la cabeza–cuello del fémur provoca la alteración articular de la cadera y explicaría el origen en gran parte de los casos de pacientes jóvenes a los que se les coloca una prótesis. Para el diagnóstico es fundamental realizar una exploración correcta y también una resonancia magnética con corte oblicuo axial en el eje del cuello femoral.

 

El paciente tipo tiene entre 20 y 45 años, practica deporte y manifiesta dolor en la zona lateral cadera y glúteo, sobre todo cuando está sentado. En esta patología el hueso sobresale más de lo normal y ocasiona un roce en la articulación, por lo que se debe fresar las partes óseas prominentes o que provocan ese roce, es decir, tallar la cabeza del fémur para conseguir dejarle la forma idónea que evite el choque con el acetábulo (la parte de la pelvis que forma parte de la cadera).

 

Por otra parte, debido al choque óseo se produce una rotura de labrum un menisco similar al de la rodilla, produciéndose posteriormente un daño en el cartílago articular y el desarrollo de la artrosis de cadera. Esta lesión se resuelve resecando el fragmento roto o reparándolo mediante una reinserción o sutura. La técnica mas avanzada para solucionar este problema es la cirugía artroscópica, siendo fundamental el diagnóstico y tratamiento precoz.