El plan de fomento de la agricultura ecológica llega a más de 2.600 leoneses
MJF/DICYT La Unión de Agricultores de León (UGAL-UPA) ha desarrollado un plan de formación dirigido a la integración en la agricultura ecológica como mejora del medio ambiente durante los últimos nueve meses que ha llegado a un total de 2.676 profesionales del campo, entre participantes en los cursos impartidos, asistentes a las charlas o receptores de las publicaciones editadas sobre el mismo. El proyecto tiene un presupuesto de 300.000 euros, del que la Fundación Biodiversidad (dependiente del Ministerio de Medio Ambiente) y el Fondo Social Europeo han aportado el 70% a través de una subvención de 210.000 euros.
El plan de formación ha tenido como objetivos promover prácticas agroambientales entre los agricultores y la reconversión a la agricultura ecológica. Para ello, se ha intentado mentalizar a las personas que viven del sector agrícola en el medio rural sobre el impacto medioambiental causado por la agricultura convencional basada en procesos químicos, tales como el deterioro y contaminación de los recursos naturales, la pérdida del valor genético a favor de variedades y razas seleccionadas y un aumento de la resistencia a los agroquímicos por parte de las malas hierbas, insectos y enfermedades, entre otras.
Por contra, se ha establecido un catálogo de buenas prácticas agrarias, que en el apartado de la energía incluye medidas para fomentar el uso de energías alternativas y renovables como la solar y eólica, el empleo de equipos de compensación de potencias para ahorrar energía y la generación de biogás de los residuos de las explotaciones ganaderas para la producir energía de autoabastecimiento. Por otro lado, la guía de buenas prácticas aconseja reutilizar el agua excedente mediante canalizaciones y garantizar el mantenimiento de estas zonas mediante la limpieza de hierbas y arbustos.
Del mismo modo, el manual hace especial hincapié en el consumo de productos empleados en el cultivo, sobre los que recomienda no usar sustancias de procedencia dudosa y atener siempre al criterio medioambiental, así como aplicar sistemas de control de plagas alternativos mediante especies vegetales adecuadas, productos fitosanitarios ecológicos y sistemas biotécnicos.
Sobre las conclusiones extraídas sobre el desarrollo del plan formativo, la coordinadora del mismo, Fini García Alonso, señala a DICYT que “hemos detectado que todavía existe un gran desconocimiento sobre los temas abordados”. Sin embargo, “todas las personas que han participado han mostrado mucho interés por los temas medioambientales relacionados con el sector agrario”. En este sentido, señala que en el transcurso del programa se han visitado un total de cinco explotaciones agrícolas de carácter ecológico que han suscitado interés de poner en marcha iniciativas similares por parte de los agricultores.
El programa formativo ha contenido un total 10 cursos presenciales sobre la integración y reconversión de la agricultura ecológica, 13 charlas de divulgación sobre distintos temas relacionados y la edición de 2.000 ejemplares de cada una de las publicaciones divulgativas elaboradas.
Una vez que el desarrollo de este plan ha llegado a su fin durante el presente mes de diciembre, Fini García indica que el sindicato ha vuelto a solicitar el desarrollo de un nuevo programa sobre agricultura y recursos medioambientales, esta vez asociado a la conservación del agua, que de ser concedido el próximo mes de febrero dará comienzo durante los meses de marzo o abril.