Medio Ambiente España , Valladolid, Miércoles, 19 de noviembre de 2008 a las 16:09
SEMANA DE LA CIENCIA 2008

"El principal problema del actual cambio climático es la rapidez con que están aumentando las temperaturas"

El profesor de la Universidad Europea Miguel de Cervantes, José Francisco Sanz, analiza en una conferencia, una visión científica sobre este fenómeno

YG/DICYT Los cambios en el clima se han sucedido de forma casi cíclica a lo largo de la historia del planeta, sin embargo, la característica de lo que actualmente denominamos Cambio climático es el “ritmo” al que está creciendo la temperatura de la Tierra sobre todo durante los últimos 100 años. El calentamiento del globo en el siglo XX fue de 0'6 grados centígrados, una cifra que podría parecer insignificante por sí sola, pero no si se compara con el hecho de que en el paso de la época glacial a la interglaciar (un periodo que se estima de 10.000 años), el aumento de la temperatura fue del orden de 0'1 grados por siglo. Una visión científica del fenómeno del calentamiento global es lo que el doctor en Ciencias Físicas y profesor de la Universidad Europea Miguel de Cervantes ha tratado hoy de acercar a alumnos de secundaria dentro de una conferencia incluida en el programa de la Semana de la Ciencia, que vive hoy su última jornada.


El experto ha insistido durante la charla que el efecto invernadero es un fenómeno natural y normal, que permite que la Tierra permanezca a una temperatura media de 15 grados, adecuada para el desarrollo de la vida, aunque ha precisado que “el problema” aparece cuando comienzan a registrarse emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero, entre ellos, el CO2, el metano, el óxido nitroso y el vapor de agua, procedentes en su mayoría de la acción del hombre.


Es entonces cuando se produce un “desequilibrio” que hace que la concentración de gases en la atmósfera sea mayor y por tanto, absorban y reemitan una mayor cantidad de radiaciones a la superficie terrestre. Pese a que estos aumentos en la temperatura se han dado a lo largo de la historia, el rápido incremento que están experimentando en los últimos 100 años está provocando que, al contrario de lo que pasó en el pasado, cuando esas variaciones eran más paulatinas, “los ecosistemas no tengan tiempo para adaptarse”.
Durante su intervención, Sanz ha diferenciado entre fuentes de emisión de co2 (principal gas de efecto invernadero) naturales, como puede ser la propia respiración, los volcanes o la descomposición de materia orgánica, y las que proceden de la acción humana, entre ellas, la combustión de combustibles fósiles, la deforestación o la producción de cemento, puesto que las cementeras emiten un 10% de dióxido de carbono a escala internacional.


Entre las soluciones a este incremento en las emisiones de CO2, el experto ha hablado de los sumideros, sobre todo vegetales, que lo que hacen es consumir dióxido de carbono en los procesos de fotosíntesis de las plantas. En este sentido, ha expuesto cómo las investigaciones han demostrado que cuando la actividad vegetal es menor, durante los meses de invierno la concentración de CO2 en la atmósfera es mayor, mientras que, al contrario, en periodos de actividad fotosintética, las concentraciones de este gas disminuyen. Otro sumidero, ha añadido, son los océanos, que capturan mayor cantidad de dióxido de carbono cuando la temperatura de sus aguas es más baja.


Para saber cuál era la temperatura hace más de 200 años, cuando no existían sistemas ni instrumentos de medición, Sanz ha detallado cómo son útiles por ejemplo, los troncos de los árboles, ya que, en función del espesor y densidad de sus anillos, se sabe si el año fue más o menos frío, o la extracción de hielo de la Antártida, que permite reconstruir el clima hace cientos de años gracias al estudio de las burbujas de aire almacenadas en el hielo.
 

El experto ha analizado algunas de las investigaciones realizadas por científicos de la Universidad de Granada, con quien colabora, que han determinado que, de continuar los actuales niveles de emisiones de dióxido de carbono en España, en el año 2100 la temperatura media del país habrá aumentando 8 grados centígrados, mientras que el incremento será de 4 grados en caso de que estas se reduzcan.