Salud España , Valladolid, Viernes, 27 de mayo de 2005 a las 19:00

Cartif estudia colaborar con la Universidad Politécnica de Cataluña en un proyecto sobre el ritmo cardiaco en diabéticos

Un investigador catalán ha visitado Valladolid estos días para formar parte de las jornadas sobre aplicación de ingeniería biomédica en la práctica clínica

BGA/DICYT El Centro de Automatización, Robótica y Tecnologías de la Información y de la Fabricación (Cartif) podría colaborar con el grupo de investigación del profesor Miguel Ángel García, de la Universidad Politécnica de Cataluña, en un proyecto sobre la variabilidad del ritmo cardiaco de los pacientes diabéticos, según señaló el propio investigador a DICYT en el transcurso de las jornadas sobre aplicación de Ingeniería Biomédica en la práctica clínica, a las que asiste como ponente.

El profesor García explicó que se trata de un proyecto que aún no está definido, pero que estudiaría un fenómeno que relaciona la diabetes con el riesgo de padecer enfermedades cardiacas, una línea de investigación que se ha abandonado en los últimos años para estudiar los ritmos cardiacos de los enfermos cardiovasculares. El investigador catalán ha explicado que se trata de una línea de trabajo con gran importancia social, ya que el número de diabéticos en las sociedades modernas va en aumento.

El investigador se encuentra desde hace unos días en Valladolid, ya que es el ponente de las jornadas organizadas por Cartif, la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid, la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales y el servicio de Medicina Interna del Hospital Clínico Universitario.

Estas jornadas están integradas por tres ponencias, dos de las cuáles tuvieron lugar el miércoles pasado. La primera en la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid bajo el título Métodos de cuantificación de la variabilidad del ritmo cardiaco y ante un público formado, sobre todo, por médicos. Miguel Ángel García explicó en su intervención el puente existente entre la Medicina y el procesado de señales. Se trató con ello de establecer los pasos para el procesado de un electrocardiograma, desde el registro de la señal, hasta los índices que elabora e interpreta el profesional médico, para después hacer un diagnóstico sobre la dolencia.

Según explicó el experto, el electrocardiograma lo que registra es la actividad ventricular del corazón (QRS). Se trata pues de obtener series de los QRS para después saber si este ritmo es adecuado o no. La interpretación de estas señales se puede hacer de diferentes formas o caracterizaciones, que sirven para conocer la salud del paciente.

La segunda charla impartida bajo el título Evaluación de la incertidumbre en la medida, tuvo como público a los alumnos de la Escuela de Ingenieros Industriales de Valladolid y sirvió para describir una norma ISO sobre la calidad de la expresión de la incertidumbre en la medida. Se trata con ella de conseguir así calcular la variabilidad del ritmo cardiaco con una fiabilidad correcta.

Finalmente, las jornadas finalizaron ayer jueves con una charla en Cartif destinada a los investigadores del centro que escucharon cómo este experto les explicó ejemplos de metodologías y series temporales biomédicas que relacionan presión sistólica con latidos, etc. También habló sobre el contraste de resultados en Ingeniería Biomédica.