Alimentación España León, León, Lunes, 28 de enero de 2008 a las 14:31

Científicos de la Universidad de León analizan los hongos que afectan a las cepas de vid de Bodegas Vega Sicilia

Se pretenden conseguir tratamientos antifúngicos naturales que eviten la muerte de la planta

IGC/DICYT Investigadores del área de Microbiología de la Universidad de León realizan un estudio para Bodegas Vega Sicilia sobre los hongos que afectan a las cepas de vid. En el peor de los casos, estos organismos pueden provocar la muerte de la planta, lo cual puede resultar un problema si afectan a las cepas más viejas, de las que se obtienen los caldos más prestigiosos. El objetivo del proyecto es obtener tratamientos naturales que eviten el avance de estos hongos, ya que en la actualidad no hay tratamientos efectivos desde que se prohibieron las sales de arsénico por su toxicidad.

 

Las enfermedades más importantes que pueden sufrir las vides son las producidas por hongos. Unos atacan la uva, como es el caso de Botrytis, produciendo la llamada 'podredumbre gris', mal que elimina el agua de los frutos dejando un alto porcentaje de sólidos (azúcares, ácidos frutales y minerales). Esta enfermedad es peligrosa porque puede hacer perder la cosecha. “Pero hay otras aún más peligrosas, las llamadas ‘de madera’”, explica a DICYT Juan José Rubio, profesor de Microbiología de la Universidad de León, “porque en ellas los hongos no atacan a la uva sino a la planta, provocando en algunos casos su muerte”.

 

Éste “es un problema grave sobre todo para bodegas de prestigio, porque de donde obtienen la mayor calidad de uva es de las cepas más viejas”, asegura el investigador. Rubio dirige un estudio financiado por Bodegas Vega Sicilia, una de las más prestigiosas de la Denominación de Origen Ribera del Duero, por el que, a partir de viñedos afectados, “hemos aislado una serie de hongos patógenos y estamos probando distintos tratamientos naturales para controlar el avance de estos hongos”.

 

Agentes de biocontrol

 

Los investigadores leoneses pretenden usar agentes de biocontrol, microorganismos que puedan tener capacidad de frenar el desarrollo de esos hongos, así como buscar sustancias químicas, “ciñéndonos a productos de origen natural”, para que la planta se defienda mejor o elimine los hongos. La intención es evitar los antifúngicos químicos, “que son bastante tóxicos”, manifiesta el científico.

 

Según Rubio, “no hay ningún tratamiento efectivo en este momento contra las enfermedades de madera”. Hasta hace poco tiempo los hongos se trataban con sales de arsénico, pero la Unión Europea prohibió estos tratamientos por su toxicidad. El estudio es fruto de un acuerdo suscrito por la Universidad de León y Bodegas Vega Sicilia en 2006. El origen de esta bodega se remonta a 1864.