Alimentación España Campinas, Sao Paulo, Acre, Viernes, 25 de junio de 2004 a las 18:54

Descubren en Brasil una variedad de café sin cafeína

El cultivo genético de esta planta podría dar lugar a un producto comercializable de alta calidad

MS/DICYT Científicos de la Universidad Estatal de Campinas, en Brasil, han anunciado el descubrimiento de una variedad de la planta de café descafeinada de manera natural. Los resultados se han publicado este jueves en la revista Nature y han llamado la atención en todo el mundo, debido al valor económico podría tener el descubrimiento. La principal ventaja del descafeinado natural sería evitar la degradación o pérdida de compuestos relacionados con el sabor y el olor durante el proceso industrial de extracción de la cafeína.

El hallazgo hace parte de un programa de investigación para el cultivo genético de una para la reducción de la cafeína en marcha desde 1987. En esta investigación se han analizado 3.000 plantas pertenencientes a 300 variedades de la especie coffea arabica, natural de Etiopia. A través de análisis de la composición química, los científicos han descubiero que tres de estas variedades, bautizadas AC1, AC2 y AC3, prácticamente no contienen cafeína (un 0'07% de cafeína, frente al 1'2% habitual). En análisis posteriores, los científicos han llegado a la conclusión de que estas plantas presentan una deficiencia de la enzima responsable de la síntesis de cafeína y presentan mayores niveles de teobromina, una sustancia precursora de la cafeína, de efectos similares pero más suaves, también encontrada en el cacao.

Todavía queda por determinar la calidad y la productividad de estas variantes, aunque los expertos creen que debido a la estrecha variabilidad genética de la coffea arabica, el producto resultante será de buena calidad. 

Pedro esta no es la primera variedad de la planta del café sin cafeína de que se tiene noticia. Existe una variedad de café salvaje de Madagascar que también presenta la ausencia de esta sustancia, pero que sin embargo producen una bebida de calidad muy inferior. Transferir la propiedad genética desde el café salvaje hacia la especie arábiga-etíope, según los expertos, requeriría cerca de 30 años de cruces genéticos entre las dos especies.

El cultivo genético entre variedades de una misma especie, por otro lado, se antoja un proceso más sencillo y se podría alcanzar en un plazo de quince años y resultaría en un producto de mejor calidad, pues en los cruces siempre aparecen características no deseables.

Por último, investigadores japoneses han logrado evitar la expresión del gene que codifican las enzimas que sintetizan la cafeína en otra especie de café, logrando una reducción del 70% de sus niveles. El café transgénico ha resultado de baja calidad para el consumo.